enero 14, 2010

Haití

¿Qué pudo hacer mal un país para recibir tantas desgracias en tan poco tiempo? ¿Cómo se puede concebir algo de justicia divina cuando al país más devastado del continente le sucede un desastre de este tamaño?

Hace unos días una amiga me comentaba en relación con la próxima muerte de una muy querida señora, que las pérdidas de este tipo funcionan para unir familias, olvidar peleas, en fin, hacer que las personas recuerden qué es lo que los hace estar cerca unos de los otros.

¿Qué cosas buenas podemos rescatar de una crisis como la que seguramente veremos crudamente en los próximos días, cuando escaseé el agua y el instinto de sobrevivencia reclame en cada individuo olvidar el contrato social? Sin duda la hermandad mundial que nuevamente se ha visto pronta e incondicional.

Que la necesidad de los haitianos sirva para unirnos en torno a una desgracia, pero que no quede sólo ahí, sino también nos haga reflexionar sobre las diferencias que como pueblos latinoamericanos hemos tenido históricamente ¿Vale la pena seguirlas venerando?

3 comentarios:

Cerebro dijo...

Y que mal que haya golpeado a un pueblo que de por sí ya tenía tantos problemas como para ser el país más pobre del mundo.

Ing. David dijo...

Si le preguntas a la derecha religiosa tal vez digan que fue el pacto con el diablo que hicieron los haitianos para lograr su independenciahttp://www.youtube.com/watch?v=Xe3QjGJewLw

Anónimo dijo...

Dios y el mundo les ayude en estos y los tiempos venideros a ese hermoso pueblo. Sera una generacion entera la q llevara esta marca y nosotros quienes tengamos la responsabilidad de mostrar nuestro lado humano demostrando q nunca estaran solos en desgracia.

Estudiantes Extrajeros Unidos x Haiti