diciembre 24, 2008

Más Democracia

Comenzando la crisis económica que hoy nos embarga le preguntaba a un profesor, economista y férreo defensor del libre mercado hasta sus extremos que si ahora sí entendía los defectos de pensar que el equilibrio llegaría como por arte de magia siempre y cuando el Estado no interviniera. Su respuesta me dejó reflexionando un poco. Dijo que lo que le hacía falta al mundo no era eliminar el libre mercado ni regresar a una situación neokeynesiana. La solución, me respondió, es todavía más mercado. Si logramos sobreponernos a los monopolios y los defectos del estado capitalista corporativista, entonces podremos verdaderamente disfrutar de un mercado real, y esta crisis nunca hubiera existido.

No es intención de quien escribe debatir sobre este tema, sin duda interesante. Más bien quiero tomar esta reflexión para recomponer un pensamiento que ha viajado en mi cabeza ya algún tiempo ¿Cómo es posible que sigamos pensando que la democracia fue y seguirá siendo la solución de nuestros problemas políticos? Para donde volteemos encontraremos sus defectos. La liberalización de la estructura política y su distribución entre diferentes ideologías y corporaciones políticas para que compitan por el poder nos ha traído además de un terrible acercamiento a la anarquía política, la sensación de que ahora las instituciones no funcionan. Miremos por la ventana y encontraremos desobediencia por doquier, automóviles que no han pagado sus placas y policías que no se dan abasto para detenerlos y hacerlos cumplir. Bandas del crimen organizado que revuelven las leyes para salir exonerados por jueces de dudosa reputación. Esquemas de propaganda política cada vez más artificiales y más frágiles sucumbidos ante el poder del dinero. Una situación internacional que agudiza los problemas internos y una secretaría de relaciones exteriores que se ha convertido en la secretaría de los paseos pagados por los impuestos sin objetivo alguno.

¿No sería mejor pensar que deberíamos regresar a una situación donde teníamos algo más de control? Latinobarómetro en más de una ocasión nos ha advertido de esta sensación en las encuestas de opinión que lanza cada año. Los latinoamericanos nos vamos decepcionando de la democracia y coincidimos que las cosas antes eran mejor; que estaríamos dispuestos a sacrificar un poco de libertad política si esto nos significara una mejor situación económica y política. A medida que vamos avanzando por esta estructura artificial de la democracia nos encontramos con más obstáculos que hacen complicado seguir siendo positivos al respecto ¿Es la competencia política un verdadero ideal o sólo un buen pretexto para que algunos se aprovechen de esta investidura para hacerse millonarios al tiempo que compran la justicia con nuestro propio dinero? La evidencia muestra que efectivamente esta experiencia ha sido una batalla que no vamos ganando. Los grupos de interés se siguen reforzando al tiempo que quiebran todo el sentido de nuestras leyes. Peor aún, las usan contra nosotros con completa impunidad y cinismo. Entonces ¿Mejor nos regresamos?

Me encantaría tener a ese profesor ahora frente y escucharlo recitar "no, el problema es que no hemos tenido suficiente democracia. Hace falta más democracia para que podamos realmente disfrutarla". Sobre los grupos de interés, tal vez respondería que no deberíamos de eliminar su posibilidad de acceder a los políticos para pedirles favores y exigir resultados. No, lo que tenemos que hacer es facilitar la creación de más grupos de interés para que la competencia de intereses genere algo más cercano a la democracia. Esto no es novedad, Robert Dahl lo mencionó hace ya varias décadas en uno de los libros más populares de la ciencia política contemporánea, La Poliarquía. Pero, ¿cómo le hacemos en México donde parece que la chequera de Slim es capaz de comprar todo, desde un legislador hasta la misma Plataforma México que tendrá la información de inteligencia más completa del país? ¿Tenemos que facilitar que otros quince Slim lleguen a nuestro mercado para neutralizar a este hombre voraz? Regresando a la situación política ¿Tendremos que permitir la entrada de otros cientos de miles de cabilderos en los pasillos de San Lázaro para que los hombres de las tabacaleras no sigan lucrando a costa de la salud de millones de mexicanos?

Hay varias respuestas. Sin duda una de las más importantes es lograr la reelección legislativa de manera indefinida. Nada nuevo. Otra, crear un padrón de cabilderos que nos permita conocer su identidad y sus intenciones, así como sus actividades diarias; esto en Washington ha permitido el descubrimiento de más de una red de corrupción y de tráfico de influencias, así como la generación de mayor rendición de cuentas entre representante y representado. Tercera, tendremos que provocar el desmantelamiento de la lamentable codependencia entre organizaciones supuestamente civiles y el gobierno. La capacidad de cooptación de grupos de presión por parte del gobierno sigue siendo inmensa. El financiamiento público sigue siendo la principal razón de que existan organizaciones ciudadanas y partidos políticos en México, generando la situación perversa de que el golpeador resulta financiado por el golpeado (y eventualmente puede dejar de golpear para seguir recibiendo dinero).

La respuesta para nuestra frágil democracia no es bajar los niveles de participación política por temor a lo que los grupos de interés pueden hacernos. Hay que salir y dar la batalla. El gobierno tendrá que abrir los espacios de deliberación o será muy complicado competir contra la chequera de Slim y el atarantamiento omnipresente de Televisa. Medios de comunicación públicos puede ser un buen inicio.

diciembre 18, 2008

Yo soy la Procuradora [de Puebla], pendejos

El Universal publica un video interesante que hoy tuve oportunidad de ver. Desconozco su antiguedad pero me llamó la atención para reflexionar con ustedes. Plantea varios cuestionamientos:

1) ¿Quién tiene jurisdicción para combatir al crimen organizado?
2) ¿Cómo está enfrentando cada uno de los diferentes órdenes de gobierno este mal?
3) ¿Estamos siendo víctimas de nuestras propias leyes?
4) ¿Es la coordinación una utopía o podemos aspirar a alcanzarlo algún día?

Por supuesto la pregunta más importante no se las hago, pero se las dejo a su consideración ¿Qué intenciones tenía la procuradora al luchar contra la AFI por la jurisdicción frente a un supuesto narcotraficante?


Saludos

diciembre 16, 2008

En épocas pre-Westfalia

"El Consejo de Seguridad de la ONU autorizó hoy el uso de fuerzas terrestres y aviones extranjeros en Somalia con el propósito de combatir a los piratas que operan contra el comercio marítimo internacional desde la costa de este país africano."

Agencia EFE
Diciembre 16, 2008

Intocables

Las casualidades suceden en un país como México. Mientras terminaba de leer Los intocables, el nuevo libro de Zepeda Patterson de la temporada y secuencia de Los Amos de México que fue todo un exitazo entre los que nos gusta la farándula y el chisme detrás de la política, llegó la sorpresa de que Jorge Mendoza, peón de TV Azteca en el Senado, cabildeó que se detuviera la nueva Ley de Instituciones Financieras en la Cámara de Diputados porque resulta un peligro para los privilegios de los grandes bancos.

Ayer Denisse Dresser (Reforma, Diciembre 15 2008) denunciaba la impresionante capacidad de orquestar a la gran mayoría de los editorialistas financieros en contra de esta reforma, señalando incluso la obviedad con que repiten los argumentos y las frases unos y otros (sin mencionar nombres ni ejemplos, cabe aclarar). Hoy, Javier Corral hace lo suyo (El Universal, Diciembre 16 2008) denunciando el triste papel que nuevamente están haciendo los legisladores ante la presión de los grupos de interés. La Ley Televisa en 2005-2006, ahora detener una ley anti Banco Azteca en 2008-2009.

Y bueno, les hablo de casualidades no por casualidad. El libro que les comento describe a una serie de brokers y malandrines que fácilmente podrían tener el papel protagónico de una película de gangsters de hace unas décadas. Personalidades atractivas, enorme poder, gran ambición, facilidad de palabra, sonrisa franca, tentáculos por todos los niveles del poder político y económico, complicidades con el crimen organizado, incluyendo redes de pederastia, impunidad al por mayor y un cinismo sin igual. Si a alguien no le gusta este perfil para su película de terror favorita es que no sabe lo que es bueno en la industria cinematográfica. Zepeda Patterson de la mano de un grupo de periodistas muy reconocidos se da a la tarea de abrir closets escondidos a diestra y siniestra. El problema, me parece, es que la enorme mayoría de estos escándalos y personajes ya los conocíamos. Nada nuevo, pues. Sin embargo ahí siguen, detentando el poder, burlándose de la justicia, llenándose la boca de botellas de coñac y con comilonas interminables pagadas con los impuestos de todos. Una descripción macabra y que provocaría escalofríos hasta al más insensible de los mortales. Pero éste es nuestro México. Así lo conocemos, hasta gusto nos da ser uno de los países más corruptos del mundo, o el más peligroso para los periodistas después de una nación en guerra desde hace casi seis años.

Si tengo que ser crítico diría que el libro no es una secuela. No logra la calidad del primero. Una de las situaciones que más me gustó de Los Amos de México fue su imparcialidad, su intento al menos por contar la historia desde todos los ángulos. En esta ocasión no, se van a la yugular desde el primer párrafo. Hay personajes que se lo tienen completamente merecido, pero hay otros que me queda una profunda duda. Sí, habremos quienes pensemos que José Luís Soberanes no ha sido el mejor defensor del pueblo que haya tenido la Comisión Nacional de Derechos Humanos, pero de ahí a la descripción cuasicriminal que hace Lydia Cacho me causa escozor. También es el caso, por ejemplo, de Paty Chapoy, quien muchos podremos pensar que es un personaje infame de TV Azteca que se presta para las peores calumnias, pero ¿es intocable? No le veo mucho el caso. Para disculpa de esta situación queda la diferencia de que en Amos de México la mayoría de los personajes ahí descritos permitió entrevistas y cotejar la información presentada. Hubo defensoría de parte de los acusados. En el caso de los Intocables ni siquiera se preocuparon por responder a las reiteradas peticiones de entrevista. Esto sin embargo, no cambia el hecho de que en esta ocasión se olvidaron de esa parte que fue muy agradecida en el libro anterior.

La descripción de este México que hace Zepeda Patterson es lamentable. Lo más lamentable es que sería muy complicado encontrar a alguien que pueda negar lo ahí descrito. Abogados que trabajan para el PAN o panistas que trabajan para abogados que litigan contra el propio Estado, políticos que han crecido cómodamente a la sombra del crimen organizado, ya sea generándoles protección o haciéndose de la vista gorda, gobernadores que se han convertido de virreyes enviados por el presidente en auténticos caciques intocables en sus territorios, a lo que cabe agregar que urge desprender la dependencia que actualmente tienen los funcionarios que supuestamente controlan al gobernador: comisionados electorales, comisionados de derechos humanos, procuradores de justicia a nivel local o el mismo sistema de impartición de justicia, quienes son elegidos por los mismos legisladores que fueron puestos a su vez por las relaciones del gobernador y el partido.

Dice el coordinador de este trabajo que el principal objetivo de su libro es comenzar a desenmascarar a quienes viven en la total impunidad. Tristemente no lo logra, pues estos personajes nunca han utilizado máscaras. Sus rostros cínicos llenan las pantallas cada tercer día con un nuevo hecho vergonzoso [insertar el rostro de Salinas Pliego y Jorge Mendoza para el último caso]. Mientras, la justicia sigue dejándose para mejores tiempos.

Zepeda Patterson (coord.) (2008) Los Intocables. Editorial Planeta.


 

Citas

"La tarea legislativa —de haberse reposicionado en esta última década por la creciente influencia del Congreso dentro de un nuevo equilibrio de poder— está rápidamente cayendo en un desprestigio por la eficacia con la que favorece intereses particulares y la lentitud, o nulidad, con la que atiende el interés público."

Javier Corral, El Universal.
En torno a la congelación de la reforma de instituciones de créditoen la Cámara de Diputados, supuestamente por presión de TV Azteca y su Banco Azteca que no quiere más competencia.

diciembre 15, 2008

Iglesia propone castigar a lavadores de dinero

No es broma, no es broma. Hoy publica Milenio que en declaración de la Arquidiósesis Primada de México, propone sancionar a los que se presten al lavado de dinero o colaboren de cualquier manera con integrantes de las células financieras del narcotráfico y crimen organizado.

Precisamente la Iglesia Católica de Norberto Rivera y Sandoval Íñiguez, altos funcionarios de esta institución que en reiteradas ocasiones han sido señalados como amigos de narcotraficantes y receptores de miles de millones de pesos en narcolimosnas.

La principal organización lavadora de dinero en México es la Iglesia. Sería desastroso para sus finanzas que en esta ocasión les hagan caso a sus ocurrencias que publican cada domingo en "Desde la Fe".

diciembre 10, 2008

Ora sí que perdón

Hay una anécdota familiar sobre un tío del lado de mi padre que solía decir una frase frente a mi madre cuando nos encontrábamos reunidos en la sobremesa. Sinaloense él y acostumbrado a las malas palabras, acostumbraba decir "con el perdón de la cuñada, pero (…)" y venían las leperadas en retahíla difícil de seguir.

La figura de varios perredistas pidiendo perdón en la pantalla chica será un espectáculo digno de la navidad que ya se nos viene encima. Estas fechas normalmente sacan lo mejor de cada persona, incluso cuando se trata de los de la izquierda. Pero no sé porqué no puedo dejar de recordar a mi tío pidiéndole perdón a mi madre, al PRD pidiéndole perdón a la sociedad. Aunque aquí podríamos considerar que las groserías vinieron antes de pedir perdón pero para el caso es el mismo.

Primero, ¿cómo creerle al PRD que finalmente va a cambiar? La trayectoria de este partido en su corta historia ha sido particularmente sinuosa. La causa, según comentan los que saben es que las tribus se van rotando la dirigencia según cada una se va desgastando por el escándalo en turno. Si no es Rosario Robles y su romance con el villano favorito del partido, Carlos Ahumada, es Bejarano y sus ligas, o ahora el mutuo foul que se metieron Ortega y Encinas en la última elección (no quiero meter la toma de tribunas como escándalo, pero agréguelo quien así lo prefiere). La nueva dirigencia, peleada a muerte con la última de López Obrador que los obligó a donarle una parte de sus sueldos, pretende cambiar su imagen. El spot parece que será espectacular, con campos de trigo dorados de fondo y sonrisas que no podrían generar pensamiento negativo alguno.

Segundo ¿realmente queremos que cambie? ¿Para qué? Soy de los que consideran que, a pesar de que el partido ha demostrado una línea bastante radical e intolerante, su aportación al sistema político mexicano ha sido benéfica. Basta un ejemplo para decir esto ¿Cuántas discusiones habrían pasado por el Congreso en fast track si no hubiera sido por la amenaza del PRD de suspender las sesiones a la mala? Antidemocráticos uno por tomar la tribuna, pero no menos antidemocráticos otros por querer hacer valer su mayoría sin siquiera conceder la deliberación. La falta de transparencia en los procesos que llevan al Legislativo a optar por apoyar una iniciativa sigue siendo uno de los grandes déficits de la democracia mexicana. Los grupos de poder siguen haciendo lo que quieren con los que actualmente se sientan en nuestra supuesta representación. Mientras esto no cambie, ¿cómo podemos concebir a la democracia mexicana en los próximos años con un PRD "negociador"? Probablemente veremos menos conflictos pero esto no significará automáticamente que las cosas en nuestro sistema político estén mejor. Una democracia pulcra y llana debe generarnos más sospechas que una donde de vez en cuando tenemos incidentes y escándalos.

Tercero ¿será éste un ejemplo que seguirán otros partidos? Si el PRD pide perdón por sus errores del pasado ¿es esto una muestra de que el PAN pedirá perdón por todo lo que ha hecho? ¿Y el PRI? Nunca terminaría si así fuera ¿Estamos realmente ante el inicio de una renovación moral de los partidos políticos? Seria ingenuo responder afirmativamente. Mejor se los dejo como reflexión.

No estoy muy seguro de qué tanto podrá ganar con esta disculpa pública el partido del sol azteca. Más bien lo veo como un error más. Ante la radicalidad de su postura perdieron el voto independiente. Ante la búsqueda del perdón probablemente perderán también el voto duro que apoyó a López Obrador y lo sigue haciendo ¿Entonces? Esperemos por el bien de la izquierda en México que Ortega acierte en esta jugada, pero es mucho lo que se está en juego.

¿Otra oportunidad?

¿Vuelve Castañeda a sus orígenes comunistas?

"
En cambio sí podría aprovechar la crisis y la coyuntura el Presidente Calderón, justamente, para proponerse la creación de una red social de derechos exigibles, como ya lo ha propuesto Levy en un libro recién publicado, para todos los mexicanos: un sistema universal de seguro médico, pensión, y seguro contra el desempleo, independientemente de que el trabajador sea del sector formal o informal, sea rico o pobre.

El momento de lanzar grandes iniciativas económicas o sociales que contribuyen verdaderamente al avance del país, suele ser un momento malo; cuando todo va bien, no parece que vale la pena arreglar lo que no está roto. Quizás, justamente, lo que hay que hacer es lanzar este tipo de iniciativa en este tipo de situación.

"
Jorge G. Castañeda / Reforma / Diciembre 10

diciembre 03, 2008

Seguridad: Sanciones para los Incumplidos

La aprobación del dictamen que crea la nueva Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública es una buena noticia para el país. Establece por primera una serie de sanciones que pueden significar la diferencia entre la pobre coordinación que actualmente tienen gobiernos locales con el federal, y un verdadero cambio en la cultura del combate coordinado entre diferentes gobiernos.

Si es aprobado tal como viene en el dictamen (escribo el miércoles por la tarde sin saber si será aprobado en la sesión del jueves), facultará al Consejo Nacional de Seguridad Pública para que sancione a aquellos que no cumplan con los compromisos establecidos en este órgano colegiado que pretender ser la máxima decisión para acciones contra el crimen. El castigo puede incluso llegar a ser que no reciban los recursos del ramo 33 correspondientes a la Seguridad Pública. Un golpe mayor para Estados que hasta la fecha siguen recibiendo estos fondos sin rendir las apropiadas cuentas sobre su gasto.

Los mayores quejosos de este asunto siempre han sido los municipios a quienes nunca les han llegado los recursos que asigna el Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública (FASP). Un caso particular ha sido el de San Pedro Garza García quien desde hace ya varios años ha mantenido una lucha contra el gobierno de Natividad González porque los recursos nunca terminan de bajar a los municipios mientras se hacen gastos espectaculares y con pocos resultados en compra de patrullas y gastos en prisiones. La respuesta, al menos legal, del gobernador y su equipo es que ellos no están obligados a destinar todo o parte de este recurso para los municipios, sino que ellos reciben en otros ramos el dinero suficiente. Esta lucha podría bien ser resuelta en un CNSP que funcionara adecuadamente, pero más importante, que sancionara al que no cumpla una vez que se tome una resolución. Supongamos que el pleno del CNSP dispone que un porcentaje del FASP debe ir a los municipios y que el gobierno del Estado de Nuevo León decide continuar ignorando la petición, una de las posibles sanciones sería que para el próximo ejercicio el Estado no recibiría dichos recursos.

Una de las peticiones que ha hecho con mayor urgencia el gobierno federal ha sido que la inversión que se está haciendo y que se hará en el futuro para la construcción y mantenimiento de la Plataforma México, sea alimentada por los gobiernos locales. De nada sirve que haya la mejor tecnología al servicio de los policías de todo el país si quienes tienen la información no la alimentan al sistema. Las razones que se han supuesto es que aún no existe la confianza para que sea compartida por policías que probablemente trabajen también para el crimen organizado. Nuevamente, si establecemos los principios sobre los cuales trabajará el CNSP, la confianza será uno de los factores que más crecerá. Se tendrán sin embargo que trabajar candados suficientes para que quede un registro claro que quién accede, qué tipo de información alimenta y qué tipo de información consulta, para eventualmente poder fincar responsabilidades si se hace mal uso de ella.

Nos encontramos en un punto de esta lucha donde sale igual de caro regresar el punto de origen que continuar. La aprobación de esta nueva ley significa el claro entendimiento de los actores políticos sobre esta situación. Establecer sanciones ha sido un paso importante que no podemos dejar de aplaudir. Cuando se trata de buenas noticias de parte de Presidencia y del Congreso también hay que mencionarlas. Sólo esperemos que 1) sea aprobada por el pleno, y 2)sea aprovechada de manera eficiente, pues el establecimiento de sanciones no significa automáticamente que el secretario técnico y el pleno del Consejo decida efectivamente aplicarlas al que no cumpla con sus obligaciones más básicas en la lucha contra la inseguridad.

noviembre 29, 2008

La otra crisis financiera

Mientras me encontraba sentado en la salita del gerente de un Bancomer hace algunos meses ya para afinar las últimas firmas de un crédito hipotecario, aprovechaba para platicar con él. Comenzaban ya algunas señales de lo que sería la crisis aunque seguramente ninguno de los dos teníamos idea de la magnitud que tendría. Le pregunté si en México íbamos a sufrir como en Estados Unidos y me respondió que no, que el IPAB sería nuestra mejor vacuna. Sin embargo continuó "El problema aquí serán las tarjetas de crédito y ya no tarda mucho en explotar esa burbuja".

Ayer el senador Ricardo Monreal hizo una declaración que podría dejar helado a más de uno. Sugería que si las instituciones financieras no respondían a las recurrentes quejas de los deudores de plásticos, el PRD organizaría a los afectados para una huelga de pago contra los bancos (La Jornada, noviembre 29). Además, que propondría una modificación legal para que los bancos no puedan cobrar más de 6% de interés anual a los usuarios de tarjeta de crédito. No es intención en esta ocasión hablar de las consecuencias que implicaría una tasa impuesta por el gobierno pero solo espero que haya prudencia a este respecto en la Cámara Alta.

Me refiero mejor al asunto de los usuarios. Cuántos de nosotros no hemos sido víctimas de los vendedores de crédito que se apuestan por todos los rincones del país. Desde la tienda departamental hasta en la salida de la escuela. Vienen con su sonrisa y su folleto multicolor ofreciéndonos el mundo rosa en el que viviremos sólo con firmar y dejarle una copia de nuestra credencial de elector. En el lugar más insospechado nos acechan con la pregunta indiscreta ¿Cuenta usted con alguna tarjeta de crédito? Le podemos ofrecer la tarjeta del mercado en donde podrá tener muchos beneficios además del privilegio de quince meses sin intereses, y lo mejor es que comienza a pagar hasta enero del próximo año. Bueno, los créditos comenzaron a ser tan baratos que a todos los bancos les resultó fácil comenzar a regalar plásticos, independientemente de la capacidad de pago de quienes lo recibían. Ahora comienzan algunas consecuencias de ese despilfarro de confianza. Los anuncios de tiendas departamentales enfocados al crédito para el mercado de bajos ingresos comienzan a resaltar la importancia de pagar responsablemente… después de cuatro años de orgía crediticia. Ahora sí, piensa que este crédito es más valioso que tu dinero. Ahora sí, señores. Pero antes no les importó que de cualquier manera siempre habría más dinero para respaldar la cartera vencida que seguía creciendo como espuma.

Nos encontramos al borde de una crisis financiera en nuestro país de igual envergadura que aquélla que sufrieron a principio de este año en Estados Unidos. La incapacidad de pago para tarjetas de crédito comienza a ser un problema real. Si suponemos que la gente pagará solamente por la confianza que le dimos en un principio tenemos que suponer que otros factores nos están afectando. La inflación sigue yéndose para arriba, más allá de que el Banco de México siga maquillando las cifras trimestrales la realidad es que el nivel de precios actualmente es casi un 20% más alto que a principios de este año en productos básicos, ya no hablemos de otros productos que se dispararon con la devaluación de septiembre. Los consumidores ya no tienen la misma capacidad de pago y si a esto le sumamos que siguen teniendo acceso irrestricto al uso del crédito, creo que la bomba es bastante evidente que explotará por allá después de navidad, cuando comiencen a llegar los estados de cuenta y la gente los comience a hacer a un lado para poder seguir comprando lo más necesario.

noviembre 21, 2008

Limpieza Dolorosa

Mientras escribo esto apenas es viernes y probablemente durante el fin de semana y hasta que lean esto se darán más declaraciones y reacciones en torno a los operativos de limpieza que está realizando Medina Mora. Ha sido verdaderamente impresionante, no hay otra palabra para expresarlo. A raíz de un testigo protegido y un impecable operativo de inteligencia han salido a flote más escándalos de corrupción que nunca.

No se puede negar que todo esto no es obra de la casualidad ni de un aumento significativo en la eficiencia de la procuraduría para investigar al crimen organizado. Algo hay de eso, pero también lo es que se ha abierto una fractura importante entre dos de los cárteles más exitosos de los últimos años. Tanto el cártel de Sinaloa como el de Chihuahua conformaron la Federación, que desde la aprehensión de uno de los hermanos de los líderes del segundo han iniciado una guerra de alta intensidad, y en donde han fallecido por igual criminales, policías y esos seres mixtos que ya no sabemos de qué lado clasificarlos. El conflicto entre José Guzmán Loaera y Arturo Beltrán Leyva está provocando que las alianzas de los segundos con el gobierno queden al descubierto de una manera dramática y por demás dolorosa.

Esta crisis debe ser motivo de reflexión. No es sólo el hecho de que estemos siendo testigos de la revelación de una corrupción sistemática en la que vive y ha vivido nuestro país durante mucho tiempo, tal vez en un silencio más cómodo pero no por eso más saludable. La misión de Calderón ha sido desde que llegó destapar las cloacas. Lo malo de hacerlo es que la pestilencia alcanzará eventualmente a todos.

El descubrimiento de que el secretario particular del gobernador de Nuevo León, uno de sus hombres más cercanos y el prísta al que tal vez el presidente le debe más desde el 2 de julio de 2006, está inmerso en negocios sucios con los Beltrán Leyva lleva esta lucha a una nueva dimensión. Ahora no se trata de señalamientos contra miembros del gobierno federal, sino que por primera vez es un ataque contra un gobierno local, pero más importante contra el partido que ha sido su apoyo en la serie de reformas legislativas desde que Calderón llegó a los Pinos.

Las consecuencias, ahora sí, pueden ser desastrosas para el presidente ¿Seguirá hasta sus últimas consecuencias? Estamos por verlo, pero al menos que se haya hecho público ya es una señal.

noviembre 19, 2008

El primer desencuentro con Obama

El anuncio que dieron algunos de sus colaboradores más cercanos el día de ayer sobre la intención del presidente electo de los Estados Unidos para renegociar el Tratado de Libre Comercio con América del Norte, y que reseña la mañana del miércoles Carlos Mota en Milenio, debe caernos como balde de agua fría.

Hace un par de semanas platicaba con un amigo de un amigo sobre la euforia de que este candidato llegara eventualmente a la presidencia. Aquí mismo presenté un escrito hablando de esa magia que infundía el hombre carismático que había sido capaz de aglutinar a la clase media en torno suyo. Le advertí en aquella ocasión a mi interlocutor sobre las amenazas que representaría que Obama llegue a la presidencia para México. No son casuales. Tenemos que entender la base de apoyo de este candidato, la clase trabajadora de los Estados Unidos y los sindicatos, uno de los segmentos más desfavorecidos con la apertura de los mercados con México. Cientos de empresas se fueron de las regiones industriales del país a zonas con una mano de obra que cobraba un décimo de lo que los trabajadores estadounidenses, en ocasiones incluso menor. La promesa de Obama ha sido que revisará las condiciones del tratado. Muchos comentaron que las palabras del candidato habían sido electorales, y que eventualmente buscaría trasladarse al centro de la ideología política. Puede ser aún una posibilidad. Sin embargo las cosas pintan para que este compromiso se concrete.

Otra de las declaraciones del candidato ganador fue en el sentido de la valla que sigue construyéndose mental y físicamente entre México y Estados Unidos. Cuestionado al respecto, Barack Obama respondió que México debería comenzar a hacer esfuerzos para detener el flujo migratorio o de otra manera él sería el principal interesado en bloquear completamente la frontera entre los dos países. Muchos nuevamente consideraron esta declaración como meramente electoral y sin trascendencia. Tendremos que esperar un poco más para conocer las primeras reacciones del grupo compacto del presidente electo a este respecto.

El hombre que llega a la Casa Blanca significa un aliento de esperanza para el mundo sin lugar a dudas. Sin embargo es importante no perder de vista que muchos de los intereses de los norteamericanos no significan necesariamente los intereses de los mexicanos. Es necesario comenzar a trabajar cuanto antes para buscar cabildear las razones de México en Estados Unidos. El electorado mexicano que votó por él deberá responder al reto que tiene enfrente.

noviembre 16, 2008

La palabra de Ugalde

La recuperación de la memoria es una necesidad de cualquier ser pensante. Cuando el sistema político mexicano se encontró en su peor crisis en 2006, comenzaron las plumas a volar contando sus historias. Analistas y políticos escribieron lo que fue su visión de aquel momento. A favor o en contra, historias cercanas y secretas se revelaron en libros que normalmente terminan siendo un fiasco. Así ha sido para varios casos que aquí he relatado. Sin embargo al encontrarme el libro de Ugalde en la librería del búho tuve que darle una oportunidad.

Hasta este momento ha sido una grata sorpresa. Faltándome unas 100 páginas para cerrarlo puedo decir que es sin lugar a dudas el mejor libro reseña de la última elección presidencial. No se trata de una defensa de las instituciones y de un señalamiento crudo contra los que decidieron no reconocer la elección. Eso hubiera sido muy fácil pero probablemente lo habría convertido en un libro más de todos aquellos que ya he mencionado. Ugalde no pierde oportunidad para señalar sus errores, pero más importante, lo que lo llevó a tomar esas decisiones. Más aún, el ex consejero presidente hace un reproche bastante fuerte y muy bien argumentado contra todos aquellos que lo apoyaron durante los acuerdos previos a la elección, y que en el momento del conflicto poselectoral lo dejaron a su suerte. La lista es larga y no respeta partido político alguno. Los más significativos son tal vez Elba Esther Gordillo y Juan Ramón de la Fuente, personajes que en su momento le mostraron todo su apoyo tanto al IFE como a él como coordinador de las elecciones y se le echaron para atrás en el momento más , convirtiéndolo en el hombre más solo de México esa noche del 2 de julio.

Reprocha, por ejemplo, el hecho que se había acordado no decir un ganador el domingo en la noche si no había una diferencia significativa, y que en el momento en que así hizo, todos lo tacharon de cobarde o de defraudador. También que fuera la UNAM la que avalara el PREP pero que durante las acusaciones de la gente de López Obrador no abriera la boca para defenderlo, siendo que fue esa institución la que lo diseñó y monitoreó en todo momento.

Se trata de un reconocimiento de los errores, pero también del apasionamiento de actores políticos que llevaron a quebrantar la confianza en las instituciones que todos habíamos formado. Es importante mencionar que muchos de estos errores que Ugalde reconoce fueron significativos, tales como la incapacidad del Consejo General para detener el protagonismo del presidente y de los empresarios. El hecho que lo reconozca no cambia el daño que hicieron. También menciona el "pecado de origen" de este consejo general sobre cómo fueron elegidos sin el aval de todos los partidos políticos en 2003, y las consecuencias que probablemente eso tendría. Ugalde es el primero en mencionar que fue un error que las cosas sucedieran así. Parece que este hombre es el primer detractor de la forma en que se dio esta selección, pero aún así aceptó el cargo con todos sus privilegios.

Sugiero la lectura de este libro para todos aquellos interesados en conocer la versión del diablo. No queda duda que el exilio de Ugalde le ha permitido escribir un libro muy bien logrado, una historia que hacía falta leer, y una versión que necesitábamos para tener el rompecabezas completo. En ciertos puntos parece que el consejero presidente cometió un solo error durante su paso por el IFE, y éste fue la ingenuidad con que se dirigió hacia los partidos políticos y sus principales actores. Un hombre que confió en los acuerdos y que finalmente fue engañado desde todos los flancos.

* Ugalde, Luis Carlos (2008). Así lo viví. Editorial Grijalbo. México.

noviembre 11, 2008

Magia

No sé cómo lo hacen pero los estadounidenses siempre encuentran la manera de producir esos espectáculos mágicos donde parece que todo es posible. Sólo en un país que alberga a Disney World y los Estudios Universales de Hollywood podemos entender una historia como la que acabamos de experimentar.

La historia imposible fue lograda gracias a la conjunción de varios factores. Primero, una crisis financiera de la que no se tenía antecedente. Algunos la comparan con la crisis de 1929 pero la verdad es que la magnitud y la capacidad de propagación de los efectos de esta turbulencia han sido y serán mucho más desastrosos que en aquella ocasión. La comunicación juega en nuestra contra esta vez, pues todos pudimos ser testigos de los indicadores bursátiles en tiempo real, y tomar decisiones de la misma forma. Segundo, una presidencia fallida, la peor de la historia también dicen algunos. La capacidad de desencanto del electorado norteamericano llegó a límites inimaginables para un partido que normalmente tiene su fortaleza en el votante conservador y temeroso del extranjero. Ahora las fórmulas del miedo no surtieron efecto simplemente porque ese votante le tuvo más miedo a su propio partido y a lo que le acababa de hacer a sus ahorros de toda la vida. Dos elementos estrechamente relacionados. Tercero, un mensaje de esperanza como no se había visto en décadas, probablemente desde Martin Luther King. Un hombre con la capacidad de tomar los dos elementos anteriores y transformarlos en un "Yes We Can" que nos recuerda el "Sí se puede" de los futboleros mexicanos en cualquier mundial.

Obama recordó a los norteamericanos lo que los ha hecho grandes en la historia de nuestra sociedad. No es su capacidad militar ni su economía sin precedentes. Es su habilidad para contar una historia que remueve conciencias y que hace a las personas creer nuevamente ¿Quién no ha visto una película con un típico final "gringo"? Ya sabemos, un hombre sin capacidad para triunfar, con todas las circunstancias en su contra, con tantos enemigos y problemas que es imposible pensar que puede salir airoso, pero con un corazón firme, con una sonrisa carismática, con un ideal que es más fuerte que todas las adversidades. Llega el clímax de la historia y finalmente vemos cómo el más fuerte sucumbe ante la fortaleza del débil. El equipo desorganizado e improvisado es capaz de ganarle el campeonato al mejor equipo de la liga sólo porque tuvieron la suerte de encontrar a un entrenador con suficiente buen corazón para creer en ellos, los perdedores.

A los norteamericanos les gustan esas historias. Les gusta creer que la magia existe, escondida en algún rincón de su sociedad. Prefieren ver al más improbable triunfar pues eso les hace pensar que entonces ellos también son capaces de conquistar el mundo sin necesidad de pertenecer a un linaje o a un grupo político o económico. Barack Obama representaba a ese hombre que no tenía ninguna posibilidad de derrotar a Hillary Clinton o al partido republicano. Sin embargo la noche del martes pasado todos fuimos testigos de la hazaña, tal vez alimentada por todos esos miles de votantes que prefirieron votar por un sueño que votar por lo que más les convenía.

El resultado es una historia digna de hacerse película. La trayectoria del hombre que logró lo imposible. La magia que vino a convertir la peor crisis de la historia de Estados Unidos y probablemente de la humanidad, en una historia de esperanza. "Yes We Can" seguían cantando a las once de la noche los simpatizantes congregados en Chicago. El hombre que representó a tantos corazones rotos ahora tiene sobre sus hombros la responsabilidad de convertir esa magia en realidad. En cierta forma cada persona de este planeta está poniendo un poco de su esperanza en ese hombre. Quisiéramos que nos contagiara algo de su magia. Tal vez era lo que le hacía falta al mundo en estos días.

octubre 31, 2008

El Supremo Poder Electoral

Cuando Antonio López de Santa Anna tomó el poder en 1836 implantó en México una figura peculiar que en su momento fue efectiva para los fines para los que fue creada, pero en la práctica resultó una losa muy pesada para la libertad política del resto de los ciudadanos. El Supremo Poder Conservador consistió en una oficina capaz de someter a los otros tres poderes y, dándole la oportunidad, a la sociedad entera a través de la voluntad del tirano en que se convirtió ese hombre unos años después. Un órgano de vigilancia extrema que podía al mismo tiempo disolver al Legislativo como aplastar las resoluciones del Judicial, o prohibir la organización de ciertos eventos e ideologías.

La reforma electoral de 2007 significó una serie de buenas medidas para controlar a los partidos políticos en los excesos producto de sus luchas por el poder. Entre las más destacables se encuentra la limitación para contratar espacios por parte de particulares, la prohibición para que partidos contraten directamente tiempo en televisión y radio, o la reducción de las campañas políticas, lo que vino a golpear severamente el control que las televisoras estaban teniendo sobre la toma de decisiones de la ciudadanía. Sin embargo, ahora podemos ver algunas de las monstruosidades que se dejaron crecer sin control, y que son precisamente los partidos políticos los que más lo están sufriendo. El riesgo es que estos excesos comiencen a permearse a la ciudadanía común. Irónicamente, al fortalecer a las instituciones electorales para que tuvieran la capacidad de defenderse de los grupos de poder, éstas se han convertido en un grupo de poder en sí mismo, por encima de los poderes constitucionales, un Supremo Poder Electoral.

La decisión de golpear al PAN, PRI y Verde Ecologista por los anuncios del Consejo Coordinador Empresarial en contra del candidato de la Alianza por el Bien de Todos ha venido a poner sobre la mesa nuevamente las extrañas y sorprendentes facultades que ahora gozan los órganos electorales, incluyendo al IFE, al Tribunal Electoral y las demás instancias de resolución electoral. Significa un aumento considerable de la capacidad de sanción, así como de su ámbito de acción. De pronto las áreas de acción ciudadana se han convertido en ámbitos en los que ellos pueden emitir resoluciones. Los organismos privados ahora son sujetos de estas autoridades, quienes los pueden multar de manera significativa. Este elemento que en un principio surgió por una buena causa se ha convertido de la noche a la mañana en una pesadilla para las esferas más íntimas del ciudadano y de las empresas.

Completamente de acuerdo en señalar los excesos de un organismo empresarial que utilizó todo su poder para someter a un candidato, pero esto no deberá significar que se tolere este tipo de ejercicios propios de un régimen autoritario por decir lo menos. La acción del ciudadano no puede ser sometida a instancias que no corresponden con su naturaleza. La tipificación de delitos para personas físicas y morales queda establecido en varios códigos como el civil, el penal, entre otros. El electoral desde un principio está entendido para abarcar la acción muy específica de los partidos políticos y sus actividades durante los periodos de campaña política, o en lo general para puntos muy particulares.

Las atribuciones que ahora se están autoproclamando el Tribunal Electoral y el Instituto Federal Electoral son consecuencia de lagunas legales que los legisladores han dejado. Ante la duda, estos organismos han preferido actuar. Una explicación a estos movimientos violentos puede caber en que éstos fueron duramente criticados durante 2006 por su laxitud y falta de voluntad. El extremo opuesto es igual o todavía más dañino.

La capacidad de fiscalización de los organismos electorales debe estar supeditada a las actividades que conciernen a ellos. Pensar que pueden regular la vida diaria de personas físicas o de organismos empresariales es una suposición peligrosa. Es momento de detener estos excesos antes de que terminen por destruir la poca credibilidad que aún les queda.

octubre 29, 2008

Democracia Económica

El discípulo de Guillermo O'Donell Jorge Vargas Cullell plantea en un libro de reciente publicación la posibilidad de que la democracia ha logrado rebasar los ámbitos políticos para comenzarse a insertar en otras áreas de acción como los mercados y la misma familia.* Pone como ejemplos la regulación de los mercados, un tema que sin duda tomará aún mayor relevancia después de la crisis financiera mundial, y los derechos de los menores aún por encima de la autoridad normalmente autoritaria de los padres. Las consecuencias de esto es que la democracia al permear otras esferas de acción provoca una asimilación más allá de lo normalmente considerado como político. Hablar por ejemplo de un mercado democrático parece una absurda contradicción. Sin embargo se vuelve cada vez más recurrente encontrar leyes que buscan una redistribución de los recursos de manera más justa, sea mediante la intervención estatal o a través de medidas restrictivas promovidas por los mismos cuerpos empresariales o sindicales.

El encuentro de la democracia con cuerpos naturalmente antidemocráticos ha puesto sobre la mesa una vieja discusión ¿Somos verdaderamente animales democráticos? ¿Es esto una invención que ha funcionado pero que no por ello deja de ser artificial? La democracia se enfrenta todos los días con sus peores enemigos en actores que supuestamente deberían defenderla ¿Es posible imaginar a un ciudadano que prefiera otra forma de gobierno donde las libertades y los derechos mínimos no estén garantizados? Cuando se defiende la completa libertad del capitalismo parece que tenemos frente a nosotros a esos ejemplares.

¿Qué implicaría pensar en un sistema con mercados democráticos? Irremediablemente se tendría que poner el acento sobre el derecho de los muchos para acceder a las mismas oportunidades que los pocos que actualmente gozan de estos privilegios. La primera crítica a esta posibilidad es que los la democratización desincentiva la creatividad y el derecho de los mejores para seguir logrando más. Cuando llevamos esa reflexión al ámbito político es cuando podemos hacer comparaciones interesantes. Los defensores del mercado desregulado plantean lo que hace un momento les comenté, y que cualquier intervención es una distorsión, ¿entonces tendríamos que pensar lo mismo para lo político? La democracia establece límites artificiales a realidades que de otra manera no serían igualitarias. Hablando de la capacidad de tomar decisiones, ésta debería recaer naturalmente sobre los más aptos, sobre los grupos de interés que tienen la capacidad de organizarse y eventualmente comprar las voluntades de los funcionarios en las instancias gubernamentales. Darle la oportunidad de tomar decisiones a personas que no tendrían la capacidad de defender este derecho sin la ayuda del Estado es entonces una distorsión de la realidad social. Los más fuertes deben gobernar y los más débiles deben sucumbir por su incapacidad para sobrevivir. Planteando esta realidad que obviamente sería rechazada por cualquier ciudadano en el siglo veintiuno es que podemos hacernos la siguiente pregunta ¿Cómo es que toleramos la injusticia en la economía mientras juzgamos con tanta fuerza la injusticia social?

La valoración de esta simple pregunta puede hacernos reflexionar varias cuestiones ¿Es necesario que el Estado intervenga en la economía como lo hace en la sociedad para garantizar la igualdad? La respuesta implica un debate tan largo como la historia del capitalismo moderno. Ante la situación mundial actual es que tenemos que preguntarnos ¿es necesario establecer controles a quienes han aprovechado su situación privilegiada? ¿Si la economía es algo idealmente libre, por qué la política no ha de serlo? ¿Qué nos hace pensar que los ciudadanos necesitamos que el Estado nos garantice derechos políticos pero que no se le ocurra meterse para garantizar derechos económicos?

Vargas Cullell nos asegura lo que para quienes vivimos en América Latina resulta evidente pero que a veces se nos olvida recordar en las instancias internacionales. La verdadera democracia no llegará mientras no podamos garantizar una democracia económica. No hablo de socialismo sino de mismos derechos para mismas condiciones. La desigualdad económica es una forma de autoritarismo, basta ver cualquier nota del periódico para responder quiénes son los que verdaderamente toman las decisiones hoy en día, en nuestra supuesta democracia.


 

*Ochoa, Oscar (2008) La Reforma del Estado y la Calidad de la Democracia. Editorial Porrúa/EGAP. México

octubre 25, 2008

En busca de la unidad

Para que algo se mantenga unido necesariamente necesita un símbolo que le permita olvidar diferencias y luchar por un bien común. El profesor Christopher Ansell de la Universidad de Berkeley considera que los elementos que permiten que una serie de grupos se mantengan luchando por un objetivo común tienen que verse reflejados en un mínimo común denominador. Ese momento cuando todos dicen que sí a pesar de todo con lo que estuvieron en contra. Pone el ejemplo en uno de sus trabajos con las huelgas que se dieron en Francia a finales del siglo 19 ¿Cómo era posible ver a anarquistas con republicanos, con socialistas y corporativistas? Sólo a través de la idea de una huelga general que beneficiaría a todos en su lucha. Movimientos tan dispares encuentran en ese objetivo la mejor razón para dejar de luchar entre ellos. Otro elemento muy relacionado puede ser un enemigo en común. Ése puede ser el mejor anti-símbolo para despertar una solidaridad que de otra manera tal vez no se habría dado.

Traigo esto a colación por los incidentes afuera de la Cámara de Senadores. Ver al Movimiento del Petróleo repudiar a los mismos partidos que lo financian parece descabellado. Andrés Manuel López Obrador encuentra lamentable una reforma en la que según la opinión pública él fue el gran ganador ¿Por qué entonces es que sigue luchando? ¿Necedad? ¿Oportunismo? Las descalificaciones se han dado al por mayor y no hay razones para refutar alguna de ellas. Parece que el problema entonces se está dando por el liderazgo en la izquierda nuevamente. Según se desprende de un trascendido de Milenio la semana pasada, el enfrentamiento se dio entre López Obrador y Navarrete por la impresión de que los conciliadores y ganadores habían sido los seguidores de éste último, mientras que según López Obrador los que habían puesto el mayor costo político para detener la reforma energética de Felipe Calderón habían sido ellos, y eran los que saldrían como los intransigentes y violentos. Cuestión de impresiones pero si volvemos al tema de los símbolos tiene mucho sentido.

El símbolo que mantuvo a la izquierda unida por lo menos desde mediados de los ochenta fue el enemigo común, el partido del que habían nacido y que en ese momento los reprimía, perseguía y asesinaba, más aún, que les había robado la presidencia con Cárdenas. Un ideal que fue brillantemente robado por Vicente Fox durante su campaña presidencial. Sacar al PRI de Los Pinos se convirtió en un símbolo atractivo para la mayoría de los mexicanos en posibilidades de votar. Cuando se logra esto es precisamente cuando comienza la crisis de las izquierdas. Algunos visos de ruptura se dieron después de ganar la capital, pero las causas en aquella ocasión parece que tuvieron más que ver con el reparto del botín ganado. Cuando se rompe el símbolo unificador es que comienzan las preguntas. Surge entonces un nuevo símbolo. La posibilidad de llegar al poder. López Obrador representó la esperanza de derrotar a los partidos mayoritarios y sobre él se unificaron todos los objetivos. Nuevamente las agendas personales se dejaron a un lado para mejores tiempos y todos se sumaron a la campaña.

La capacidad de mantenerse unidos nuevamente fue puesta en peligro ante la derrota. Los movimientos en defensa del voto y contra Felipe Calderón el "usurpador" se han ido desgastando conforme avanza la administración del actual presidente. El petróleo fue una bandera que funcionó acertadamente para intentarlo. La apuesta de una parte de la izquierda sin embargo prefirió ya no jugar en ese espacio. La negociación con el enemigo se convirtió en una posibilidad real, especialmente cuando desde el PRI se apoyó la candidatura de Jesús Ortega para presidir el PRD con miles de votantes anónimos que llegaron ese día a las urnas. La imposibilidad de lograr el poder por ninguno de los dos grupos ha puesto en entredicho por primera vez la supuesta unidad de la izquierda. Las divisiones que siempre han existido en este movimiento, primero democratizador en 1988, luego por el poder en 2006, nuevamente en defensa de la democracia en 2007 y finalmente en defensa del petróleo este año, están floreciendo con mayor intensidad.

El futuro de una izquierda unida dependerá de que sean capaces de encontrar un nuevo símbolo de unidad. De otra manera, las divisiones naturales entre estos grupos antagónicos finalmente romperá el acuerdo y probablemente seamos testigos de una balcanización de la izquierda. Dependerá en buena medida también de que sean capaces de encontrar un enemigo en común. La crisis económica puede ser el mejor aliciente para encontrar esas nuevas brujas.

octubre 24, 2008

Citas

"Primero fue la violencia entre los narcotraficantes, pero como yo no soy un traficante, no dije nada.
"Después fue el secuestro de la gente rica, pero como yo no soy rico, no dije nada.
"Después vinieron por la gente que causaba conflictos, pero como yo no tengo problemas con nadie, no dije nada.
"Al final, vinieron por mí, y ya no quedaba nadie que pudiera hablar por mí".

Alejandro Junco de la Vega
Publicado en Carmen Aristegui, Octubre 24, 2008

octubre 22, 2008

Derecho a la morbosidad

Estoy seguro que cualquiera que viva en Monterrey lo habrá experimentado. Es más, aunque no se viva aquí es muy probable que la escena se repita en cualquier ciudad. Pasa un accidente e inmediatamente el tráfico se detiene. No importa si es aparatoso o no, no importa si hay heridos o no. No importa si invade carriles o si se encuentra justo en los carriles en sentido contrario de forma que no hay razón para que estemos detenidos, y sin embargo lo estamos. No importa, irremediablemente pisaremos el freno, voltearemos al lugar del accidente, observaremos la desgracia ajena hasta la saciedad y entonces procederemos con nuestro camino, probablemente con un "qué barbaridad". Podremos ir mentando madres durante los treinta minutos que nos lleven hasta el origen del tráfico, pero cuando estemos frente al carro aplastado, las patrullas y la ambulancia, contribuiremos al desmadre ciudadano. Lo imaginamos como nuestro derecho después de haber esperado tanto nuestro turno. Si todos lo hicieron ¿por qué yo no?

Cuando sabemos de historias de corrupción o de escándalos políticos, normalmente hacemos lo mismo. Pensamos que es por eso que el sistema no funciona, que tenemos que generar un cambio cultural para que el país pueda cambiar. No hay de otra. Vamos avanzando por la fila interminable del accidente. Maldecimos a los maestros que se ponen a hacer paros y plantones en lugar de darles clases a nuestros hijos. Son unos privilegiados que en lugar de rezongar deberían ponerse a trabajar como todos nosotros. Luego vemos a un par de ejemplares políticos en la televisión tomando la tribuna y lanzando consignas contra el sistema. Rogamos para que del cielo bajen arcángeles que los hagan desaparecer de la faz de la tierra. Es por culpa de ellos que todo está detenido, intentamos focalizar todo nuestro coraje contra los malvados que retrasan a nuestro país, que no le permiten llegar al primer mundo y a la riqueza. Hasta somos capaces de mostrar paso a paso cómo es que México podría lograrlo si es que todos nos ponemos de acuerdo en que eso que yo pienso es lo mejor para todos.

Vamos por la vida creyéndonos poseedores de las respuestas necesarias. Suponemos que nuestra propia existencia es un activo y que sólo es cosa de que el resto del mundo se dé cuenta de nuestra sabiduría extraordinaria para que comiencen a escucharnos. Seguimos avanzando por esa línea, y luego sucede. Llegamos al punto del accidente. Nos percatamos que todo lo que hizo que los demás se detuvieran después de todo no era una tontería. Es un carro completamente despedazado, con personas mutiladas a la vista, con la prensa y los policías tomando nota, con un charco de combustible avanzando peligrosamente hacia otro automóvil encendido. No puede uno nada más dejar ese espectáculo porque sí. Tenemos la oportunidad de seguir avanzando y ayudar en algo con el problema pero es mejor detenerse y no perderse nada de lo que tenemos ante nuestros ojos.

Normalmente tendremos en la vida algunas ocasiones de hacer una diferencia. Podremos decidir si nos quedamos viendo la morbosidad de la situación o si hacemos algo para resolverlo. Está en nuestra cultura detenernos, o al menos eso es lo que nos hacen creer los que van justo delante de nosotros que van haciendo lo mismo. Tenemos la desfachatez de pitarles para que se muevan pero cuando es nuestro turno ejerceremos nuestro derecho a la morbosidad sin ningún recato ¿Estaremos a la altura de la situación cuando esto suceda o haremos como todos? ¿Maldito sistema hasta que nos toca a nosotros disfrutarlo?

octubre 20, 2008

Citas

El disparo no se realizó a un metro de distancia, como establecieron peritos de la procuraduría, y mucho menos en un lugar y tiempo distinto de donde ocurrieron los hechos. La investigación de la CNDH plantea que los disparos provinieron de un camión de volteo que se alcanza a apreciar en las imágenes grabadas por Will antes de morir. Además asienta que el tiempo calculado entre la detonación y el impacto del primer disparo, ocurrió en aproximadamente 166 milésimas de segundo, tiempo en que una bala calibre 38 especial recorre una distancia de 45 a 50 metros (promedio 42.5 metros), lo que pericialmente permite afirmar, con un alto grado de probabilidad, que el victimario se encontraba ubicado detrás del camión de volteo.

Comisión Nacional de Derechos Humanos en torno a la supuesta responsabilidad de miembros de la APPO en el homicidio de Brad Will en 2006.

octubre 19, 2008

Citas

"Estados Unidos tiene esencialmente un sistema de partido único y el partido gobernante es el partido empresarial."

Noam Chomsky, al ser cuestionado sobre las elecciones de noviembre

octubre 17, 2008

“A los jóvenes se les enseña a dejar sus ideales”

A pregunta expresa de un estudiante del auditorio que cuestionaba a la escritora Elena Poniatowska el mediodía del viernes sobre cómo hacer para que la lucha revolucionaria no afecte las instituciones que nos hemos creado para convivir, la señora respondió con la frase que le he robado para titular mi escrito de hoy. Sería una respuesta ilógica hablar de una revolución que respete el institucionalismo por más que el PRI nos haya hecho creer ese cuento con el nombre de su partido. Es una contradicción.

Hablaba en otra parte de su discurso en la visita que tuvo hoy al Tecnológico de Monterrey sobre los jóvenes del 68 y los actuales. Ante la queja recurrente de que los de ahora son más apáticos y egoístas, ella respondió que son ahora mucho mejores en cuanto al nivel de información que tienen. También nombró una lista de jóvenes valientes que han increpado a presidentes, expresado su repudio y mostrado la valentía que implica romper con el protocolo de una ceremonia formal. Sin embargo a los jóvenes de ahora se les ataca para pensar que las luchas idealistas son malas. La misma pregunta de este visitante que nos acompañó en la plática expone la seriedad de la situación. Las luchas revolucionarias no deberán lastimar la estructura social reinante, una que se desgaja por donde se le quiera ver, llena de desigualdad e injusticias. Tendremos que como jóvenes respetar las reglas y mantener las instituciones que nos han llevado a la situación en la que nos encontramos, o seremos calificados de idealistas en el mejor de los mundos y con adjetivos mucho peores en otras circunstancias.

Hablaba Karl Marx de cómo las leyes e instituciones se convierten en rejas de los detentadores de los medios de producción (o de control político si le hacemos caso al Marx que escasa pero brillantemente escribió sobre sociedad). Además, la Escuela de la Teoría Crítica de Frankfurt, abiertamente marxista en sus inicios, señalaba la propaganda de los medios de comunicación al servicio de los medios de producción. En este discurso se le hacía creer al individuo que se encontraba en el mejor mundo posible y que intentar cambiarlo iría en contra de sus intereses. En ajedrez eso tiene un nombre: Zugzuang. Cuando el jugador es capaz de enviar a su adversario a una posición donde cualquier movimiento que haga le hará daño, recibe el nombre que aquí pongo. La Teoría Crítica evolucionó con Habermas, pero la realidad no ha cambiado en nuestro mundo, menos en nuestro país.

Una conferencia maravillosa que nos regaló Poniatowska el viernes a los que pudimos acompañarla un ratito. Una pregunta que me hizo levantar la ceja especialmente porque provenía de un joven que supuestamente debería tener más preocupación por los ideales que por las reglas y las instituciones (un mal bastante generalizado en esta ciudad), y una respuesta que espero le haya hecho reflexionar un poco. A mí me hizo hacerlo.

octubre 14, 2008

¿Malditos especuladores?

La revelación del martes por El Universal de la lista de empresas que "especularon con el peso" y provocaron la devaluación de nuestra moneda nos debe dejar varias reflexiones. Aunque la nota afirma que su fuente son "especialistas", el golpe mediático parece una cómoda filtración de la Secretaría de Hacienda para lavarse las manos ante el desastre financiero de la semana pasada agravado por ellos mismos y por la gente de Banxico.

El señalamiento público es una herramienta muy efectiva a la hora de intentar dominar a un adversario. Humillar públicamente a una persona o grupo tiene un efecto psicológico desastroso. Normalmente cuando los desastres vienen, la sociedad se apresura a buscar culpables. Es natural, si tenemos un enemigo frente a nosotros que nos ha causado el dolor, es más fácil liberarse de él a través de una venganza, un ataque o simplemente a través de la humillación y la burla. Sin embargo como también lo afirma la nota del mismo periódico, especular no es delito. En el mercado de derivados es posible asegurar tipos de cambio para pagos futuros. El aumento de tasas de interés que hizo el Banco de México el mes pasado provocó la apreciación del dólar hasta 9.80 y las empresas decidieron asegurar ese tipo de cambio. Si me regalas dinero, por supuesto que me lo voy a echar a la bolsa. Eso eventualmente generó la presión sobre nuestra moneda cuando se fue acercando la fecha de pago y los acreedores tuvieron que solicitar dólares en el mercado.

Se puede hablar de información privilegiada y probablemente haya algunos culpables en esta situación, sin embargo eso no debe hacernos olvidar lo importante. Culpar a empresas por haber aprovechado una situación inicialmente creada por el propio Banco de México (con la injustificada alza de intereses), es un intento muy absurdo de encontrar chivos expiatorios en una crisis que fue creada desde las oficinas de Guillermo Ortiz. Ver a Agustín Carstens lanzando acusaciones lópezportillistas en los pasillos de Washington es lamentable. Si quieren encontrar un culpable de lo que sucedió la semana pasada en México, busquen en sus propios edificios.

El pésimo manejo de la crisis por parte del gobierno federal es lo que provocó que las empresas aprovecharan el regalo. Siendo positivos podríamos decir que fue falta de comunicación entre Hacienda y el Banco de México al enviar señales cruzadas en los mercados. La inminencia de la crisis mundial genera en cualquier empresa la necesidad de protegerse lo más posible. Protegerse no es un delito, y menos cuando el gobierno se acomoda especialmente para que lo hagan.

octubre 10, 2008

Viejas Prácticas

Morelos es nuevamente víctima de una injusticia de parte del gobierno federal. Se podrá estar o no de acuerdo con la lucha que realizan los maestros disidentes pero hay situaciones que no deben tener cabida en una democracia supuestamente institucionalizada. La desaparición forzada así como rumores que hablan de maestros muertos que no han sido reportados por la prensa son señales preocupantes en un gobierno que cada vez se siente más cómodo con prácticas autoritarias.

El peligroso maridaje entre medios de comunicación y gobierno que ya he señalado en varias ocasiones en este espacio vuelve a aparecer con todas sus letras. Se reporta la entrada de las fuerzas federales a Morelos y enfrentamientos en Reforma y El Universal, así como en los noticieros de Televisa en la mañana. Se habla de algunos detenidos que serán puestos a disposición de la procuraduría federal de la república, pero nada más. Me encuentro a una amiga en línea con amigos en el magisterio que le han platicado sobre algunos desaparecidos ¿Y la nota no la has encontrado? No, nada. Es hasta unas horas después que La Jornada hace la primera nota al respecto ¿Muertos? No dicen nada. En el enfrentamiento de anoche el amigo vio a dos muertos que no aparecen en ningún periódico o canal de televisión.

Represión y populismo, dos prácticas que repudiamos del antiguo sistema comienzan a ser pan de cada día en el partido que irónicamente simbolizaba todo lo contrario. Las crisis hacen que los gobiernos de diferentes partidos se parezcan tanto que podrían darnos un ataque de risa si la situación no estuviera como está. Al tiempo que llenan la televisión y la radio con mensajes de oportunidad aprovechan el desorden financiero para anunciar la construcción de una refinería y combatir el desempleo que supuestamente no nos golpeará. Creación artificial de esperanza, viejo esquema priísta de control social.

Al tiempo que todo esto sucede, los medios de comunicación sufren de una amnesia temporal y una sumisión verdaderamente lamentable. Al tiempo que todos los ojos miran con preocupación cómo las bolsas del mundo se van al diablo, la oportunidad que tiene el gobierno para reprimir sin respuesta es enorme. Los maestros parecía que lo estaban buscando. Los problemas económicos y el descontento social era una oportunidad para el desorden. Los maestros lo supieron y lo atacaron. No son ningunos inocentes ni improvisados, eso me queda muy claro. La respuesta del gobierno tuvo que haber sido inmediata. El problema, como siempre, es que las formas no se cuidan. Ante la amenaza, el manotazo bruto. Ante el problema social, la respuesta violenta. Lo único que ha logrado el gobierno federal es caer en la trampa que le puso el magisterio disidente. Ahora ya no se tratará de la alianza por la calidad de la educación contra la que no podría haber un solo individuo en contra. Ahora se trata de la represión que han efectuado en contra de ciudadanos mexicanos. Y si se confirman los muertos y los desaparecidos, las cosas se le pondrán muy difíciles al gobierno ¿Alguien le puede prestar un asesor al presidente? Parece que su gobierno de cuates comienza a salirle muy caro al país.

octubre 08, 2008

¿El partido invencible?

Cuando se habla del PRI parece que se habla de un inevitable. El monstruo electoral que significa ese partido es invencible, irremplazable, inexorable, vamos, parece una pesadilla para el resto de los partidos contendientes. Verlos actuar en Guerrero al mismo tiempo que logran poner de rodillas al Ejecutivo Federal por segundo sexenio consecutivo es toda una muestra de buena política, aquélla que no ha logrado repetir cualquiera de los otros dos que aspiran a algún día tener las habilidades del maestro.

Hace unas semanas cuando comenzaba la temporada 2008 de la NFL y los Vaqueros de Dallas lograron tres triunfos contundentes hubo más de uno que los señaló como los claros favoritos para ganar el Super Tazón. No había nada qué decidir, solo bastaría ver pasar las dieciséis semanas de la temporada más las tres o cuatro de postemporada que nos llevarían al resultado definitivo en donde el equipo de América se coronaría campeón. La semana siguiente los Pieles Rojas de Washington los hicieron pedazos. Lo que hubo de parte de esos mismos comentaristas fue un humilde silencio.

No dejo de ver por todos lados a futuristas que declaran el triunfo del PRI en 2012 como algo a lo que nos tenemos que ir acostumbrando. Peña Nieto tiene el camino pavimentado para lograr el regreso del partido otrora hegemónico a la silla presidencial. Probablemente sea así, pero hay demasiados factores en el aire como para hacer una declaración de ese tamaño. Primero, veamos el pasado más reciente. Cuando en 2003 el PRI propinó una contundente derrota al PAN en las intermedias al tiempo que se hacía de la mayoría de las gubernaturas la voz general de politólogos y analistas era que no había quién pudiera detener al partido para regresar en 2006. Tal vez López Obrador, pero el PRI tenía una estructura electoral mucho más completa que cualquier otro. Los "promotores del voto" eran una maquinaria indestructible. Luego comenzamos a leer algunas notas que señalaban que la fórmula Gordillo-Madrazo tenía algunas fisuras, y finalmente fuimos testigos del Todos Unidos Contra Madrazo y de la "propuesta" de Gordillo a Calderón para que el 2 de julio los maestros votaran cruzado (uno de tres).

Una de las características que hicieron que el PRI fuera tan exitoso durante tanto tiempo como opción política fue la capacidad que tenían sus dirigentes para garantizar la disciplina de sus miembros. Eso hoy en día ya no es tan fácil de asegurar. Ante la pérdida de la presidencia los gobernadores regresaron a las prácticas previas al pacto de Plutarco Elías Calles. El cacicazgo se volvió una opción más rentable para la mayoría de esos líderes pues no tendrían que rendir cuentas a nadie. Pequeños señores feudales que no tienen ningún incentivo para volver a permitir que llegue un presidente de su mismo partido ¿Qué nos hace pensar que en esta ocasión se doblarán ante Peña Nieto o cualquier que quede en ese partido?

No veo duda que 2009 será completamente del PRI, tanto en los diputados como en las elecciones locales. No hay forma que alguien le pueda hacer sombra a este partido en el Estado de México. Sin embargo la situación vuelve a ponerse difícil en el partido. Demasiados aspirantes y reglas que no son muy claras son el mejor caldo de cultivo para que se repita la historia. Un partido que no será capaz de organizar las elecciones nacionalmente. Parece que el destino es que el PRI se vuelva el partido más fuerte a nivel regional, llevándose la mayoría de las gubernaturas, pero no será capaz de ponerse de acuerdo cuando se trate de ceder ese poder a alguna de las figuras que hoy ya se señalan como posibles candidatos. Prácticamente cada gobernador de este partido tiene aspiraciones presidenciales ¿Cómo será posible sacrificar tanto ego por el bien del partido? Beatriz Paredes no ha mostrado que lo pueda hacer. Beltrones podría ser una opción pero con sus propias aspiraciones a flor de piel será muy difícil que alguien lo tome seriamente. Ante un escenario tan dividido en PRI y PRD ¿Será que el PAN repetirá el día de la elección? Requerirá un esfuerzo sobrehumano de cualquiera de estos dos partidos evitarlo.

octubre 05, 2008

Guardias Blancas

Hasta las 11 de la mañana del domingo eran 59 los muertos en Tijuana. Nada me dice que para cuando este escrito sea publicado por mis amigos de 15diario este número se haya mantenido inamovible. Parece que la estrategia de la "autoridad" en Baja California es dejar pasar, como lo han hecho en los últimos años.

La lucha, según publica Reforma este domingo, es entre dos líderes que se disputan el control de la plaza del otrora poderoso cártel de Tijuana, hoy deshecho en una guerra sin cuartel entre las bandas que han quedado después del enfrentamiento frontal contra el cártel de Sinaloa. Los muertos entonces serán de criminales del cártel de Tijuana contra criminales del cártel de Tijuana. Si las cosas fueran así de fáciles entonces no tendríamos más que sentarnos y esperar a que entre ellos se exterminen. Luego llegará la policía a recoger a los muertos y mirar para otro lado.

Hace algunos años se hicieron famosos unos cuerpos en Colombia que la gente empezó a llamar las guardias blancas. Se trataba de matones contratados por la elite empresarial, y se sospechaba que por el mismo gobierno, para eliminar a los grupos guerrilleros, principalmente de las FARC. Los asesinos asesinados comenzaron a aparecer sospechosamente en las calles con mensajes políticos. La respuesta de la sociedad, pero sobre todo del gobierno, fue de cierta indiferencia. Algo así como lo que pasa en México. Si se están matando entre ellos, no se metan. Déjenlos. Son enfrentamientos entre grupos disidentes de las dirigencias de las guerrillas. Si se quieren matar, que lo hagan ¿para qué meternos? Luego se supo lo que ya les dije. Comenzaron a salir historias de que estos matones no eran guerrilleros sino que eran pagados por los mismos empresarios que habían sido víctimas de los secuestros y los asesinatos de las FARC.

Si una sensación ha quedado clara en la clase empresarial mexicana es que se encuentran hartos de ser víctimas de los delincuentes al tiempo que el Estado finge trabajar pero no muestra resultados. La mediocre procuración de justicia en nuestro país parece destinada sólo a castigar a pequeños comerciantes que venden sus productos en una banqueta, a protestantes en una marcha histórica que se les salió de control, al ganador de un premio nacional de la juventud que cree que en su país goza de libertad de expresión. Para los delincuentes organizados sólo tiene pretextos y emotivos comerciales que quieren convencernos de que algo están haciendo.

¿Qué puede hacer un grupo económico como éste ante la agresión directa de los criminales sin respuesta del Estado? Si analizamos la respuesta en Colombia, su reacción fue contratar seguridad privada pero no precisamente para protegerse sino para contra atacar. Me pongo en los pies de un padre al que le acaban de matar a un hijo y con los recursos suficientes para responder con la misma moneda. La erosión de las instituciones que nos permiten convivir de manera pacífica nos lleva a una situación donde tenemos que aprender a responder a la violencia con más violencia ¿Es lo que está pasando en Tijuana? ¿Son estos 59 muertos productos de una guerra entre bandas? No podríamos descartar que se trate de la primera respuesta de la sociedad civil. No aquélla que responde con presiones y con manifestaciones. Se podría tratar de una sociedad que tiene por lo menos veinte años sufriendo el crimen organizado, primero tolerándolo porque se trataba de "guerra entre bandas". Cuando en Baja California comenzaron a recrudecerse estos conflictos, comenzó la falta de dinero y se popularizó el secuestro y el robo como mecanismos para hacerse de ese recurso. Los empresarios pueden estar respondiendo con sus propias armas.

Otras ciudades como Ciudad Juárez, Monterrey, Culiacán y el mismo Distrito Federal tienen algunas características similares: una clase alta poderosa y un crimen organizado que ha degradado cualquier esperanza de que la policía les pueda dar la seguridad necesaria ¿Estamos en la antesala de una guerra entre el crimen organizado y los grupos empresariales? Algunos signos comienzan a darse en Tijuana ¿La efectividad en esta ciudad hará que se propague a otras latitudes? ¿Son estos 59 muertos las primeras víctimas de una sociedad harta de que el Estado no pueda hacer su trabajo?

octubre 01, 2008

Enfermos

La visita de Antanas Mockus a Monterrey dejó varias sorpresas. Sus anécdotas fueron profundas y creativas, pero sin duda una que se llevó la noche fue su consideración de los narcotraficantes como personas enfermas a las que hay que ayudar. No habla de los adictos, posición en la que probablemente estaríamos de acuerdo. Habla de los narcotraficantes, miembros del crimen organizado encargados de la distribución de droga en determinadas plazas. Llamó a darles alternativas, son hombres adictos al dinero fácil, sin embargo no están conscientes que este negocio les reduce su esperanza de vida. Lo que tenemos que hacer entonces es plasmarlos ante esa realidad, la inminencia de su muerte, la necesidad de que se den cuenta de lo sagrado que es la vida. Requerirá un ejercicio de perdón social pues para ser asimilados nuevamente en el entorno sociocultural de nuestras ciudades necesitan confesar los males que han hecho públicamente, arrepentirse y finalmente ser admitidos por la sociedad nuevamente. Lo terrible, afirma Mockus, es que los narcotraficantes no vean estas alternativas, que la sociedad no se las dé. Entonces se volverán como los cínicos de la antigua Grecia a los que ya no les importa hacer o no hacer, el temor o la vergüenza. Serán ellos solos contra el mundo que seremos nosotros.

No dejó de sorprenderme esta perspectiva, tal vez por novedosa ¿Tenemos que esperar que los criminales actúen por enfermedad y tenemos la responsabilidad de levantarlos de su desesperada vida? ¿Su vida es una lista de sufrimientos con los que tenemos que simpatizar y ofrecer nuestra ayuda? Cuestiones interesantes. No las descarto pues sin duda el hombre tiene a su favor haber logrado reducir 40% los delitos en Bogotá durante su administración según nos cuentan sus reseñas biográficas en la red.

Escucharlo me recordó un poco algunos fragmentos de la pluma de Michel Foucault, cuando describe en "Vigilar y Castigar" la evolución del castigo en nuestra sociedad moderna. Los criminales han dejado de ser castigados con instrumentos de tortura para convertirlos en enfermos mentales, sujetos de clínicas, observación, experimentación y confesión (forzada o voluntaria, si es que existe alguna diferencia entre ellas después de varias sesiones de lavado de cerebro). Los cuerpos se vuelven en animales de laboratorio para la interpretación y entendimiento, la definición hasta el punto más invasivo que se convierte en un círculo interminable (soy porque me defino porque pertenezco a una definición/categoría formada por mí mismo o un otro). También me recordó un poco aquella excelente historia de Stanley Kubrick "La Naranja Mecánica", donde el protagonista es un criminal sin remedio pasado por un experimento psiquiátrico-químico para terminar siendo el hombre más noble del mundo (sólo para ser alcanzado por los anteriores agraviados). Resulta en una visión un tanto alarmante donde tendremos que aprender a convivir bienportados con malportados en una misma jaula, intentando fingir sonrisas y solidaridad. Construyendo una comunidad más unida es que podremos aspirar a una mejor sociedad. Los criminales tendrán que ser nuestros héroes del mañana para así cumplir con el ideal de la readaptación, la solución clínica del criminal y la recuperación del sentido de la sociedad como un sujeto formador del individuo. Cualquier deformado es responsabilidad de la sociedad mientras no reaccione frente a él.

septiembre 26, 2008

Lecciones del Desafuero

La clase política no aprende nada. Eso me queda bastante claro mientras veo que todo se organiza en torno al linchamiento del candidato más popular del PAN para ocupar la gubernatura en Nuevo León. Parece que no hay vuelta atrás, pero así también parecía en 2005 cuando el otro candidato popular fue intentado pasar por la "justicia legislativa" de nuestros diputados.

La situación parece ser muy diferente. Mientras que al candidato presidencial sólo le pudieron demostrar una negativa a una resolución judicial sobre la construcción de un camino a un hospital, a Madero parece que le han encontrado varios desvíos, entre los que destaca un cobro indebido a una empresa de publicidad en puentes peatonales, además de una enorme cantidad de reclamos de representantes de organismos intermedios sobre "cuotas" cada vez más elevadas para permisos de cambio de uso de suelo en la oficina de desarrollo urbano.

Nuevamente el error es pensar que una autoridad tiene control sobre todo lo que sucede en su administración. En varias ocasiones he expresado mi punto de vista a este respecto. Adalberto Madero tiene posibilidades de estar enterado de lo que sucedía en Desarrollo Urbano, pero también hay la posibilidad de que se estaban pidiendo donaciones sin que pasaran por la oficina del alcalde. Mientras que no se le demuestre lo contrario el único responsable en todo caso podría ser el titular de la oficina señalada.

También, si el caso amerita una sanción penal contra el presidente municipal, la estrategia huele más a un intento electoral por impedir que un candidato popular (aunque a muchos no les guste que así sea) llegue a la boleta el 6 de julio próximo. Las implicaciones para el sistema político de nuestro país ya las vimos, pero parece que queremos seguir intentándolo. Según esta experiencia, agredir por medios judiciales a candidatos populares sólo provoca que éstos se fortalezcan, y es probable que eso veamos en las próximas semanas a medida que le permitan a Madero posicionarse como víctima de su propio partido y de la clase política en Nuevo León.

Significa un retroceso más para la democracia en este Estado. El problema no es que se castigue a un político que cometa irregularidades, eso no está en cuestionamiento. Lo que sí resulta hipócrita es esta agresión jurídica contra un candidato al que probablemente tienen miedo de no poder derrotar en las urnas. Significa una imperfección de la democracia que podría ser utilizada cada vez con mayor frecuencia con el peligro que esto significa. Porque si se trata de llevar a la justicia a políticos con antecedentes dudosos muy pocos podrían salir bien librados de los que ahora se intentan candidatear, empezando por el que anda ofreciendo zonas protegidas a desarrollos inmobiliarios a cambio de su apoyo. Si se está intentando un movimiento purificador de la clase política, que se haga con todas sus consecuencias. Si se trata de un golpe político sólo para evitar que Madero llegue a la candidatura, entonces el que pagará las consecuencias no será él, sino el sistema político y la confianza que supuestamente tenemos sobre la imparcialidad de la justicia en nuestro Estado.

septiembre 24, 2008

Crisis financiera y campañas de miedo

Hay varios puntos que conviene rescatar sobre la confluencia de dos factores en Estados Unidos que supuestamente no deberían estar relacionados, pero parece que lo están. Primero, la crisis financiera, y segundo la campaña presidencial. Cuando digo que no deberían estar relacionados no me refiero a que no deban ser abordados por los candidatos sino que no deberían estar tan íntimamente relacionados como se sospecha que están.

Primero, se ha hablado que varios asesores de la campaña de McCain están directamente relacionados como consultores de algunas de las instituciones que están siendo investigadas por el Buró Federal de Investigación (FBI) bajo sospecha de fraude. Segundo, el hecho que han tocado algunos analistas respecto a la posibilidad de que esta crisis esté buscando ser aprovechada por el partido republicano con dos intenciones: una, promover nuevamente la estrategia del miedo que tantas veces les ha sido efectiva (antes era el ántrax, ahora es perderlo todo frente a la "inexperiencia" de Obama); dos, la posibilidad de presentar a Bush como el héroe que pudo rescatar al país de la hecatombe financiera con la inyección de 700mil millones de dólares que está buscando del Congreso de los Estados Unidos, y que muy probablemente le terminen prestando a pesar de sus deseos. No hacerlo tendría un costo todavía mayor.

La primera pregunta sería ¿tendría un grupo elite como los llamados halcones la posibilidad de controlar una situación como la que se está viviendo ahora? Un acceso al que seguramente tuvieron fue el mercado del petróleo. Mucho se ha dicho que los precios del hidrocarburo fueron presionados a través de especulaciones financieras artificiales. En un escrito anterior hacía la pregunta de a quién podría beneficiar esto ¿Cómo beneficiaría una crisis financiera al partido republicano? ¿No sería al revés pensando que el precio del petróleo degradaría la calidad de vida de los norteamericanos y esto provocaría un descontento hacia el gobierno actual? Respondería que sí, pero a la vez preguntaría cómo puede beneficiar al partido republicano estar enviando a los hijos de sus electores a morir en países del Medio Oriente, y sin embargo lo hacen con todo lo electoralmente atractivo que esto ha resultado al menos en el corto plazo ¿Estamos ante una situación similar donde se busca crear miedo para así generar el voto compulsivo del electorado norteamericano? Hasta este momento la intensificación de la crisis no ha golpeado a las encuestas de salida para la intención de voto del presidente en noviembre, pero ésta aún no ha golpeado al ciudadano común. Aún estamos en una crisis entre prestadoras, lo que eventualmente se traducirá en crisis de los que reciben estos préstamos: los bancos y los deudores como usted y yo.

¿Cómo evolucionará esta crisis? Muchos ni siquiera atinan a descifrar el diagnóstico, mucho menos los escenarios. Aquéllos que podrían beneficiar más al partido republicano serían dos: el partido se convierte en el estandarte de la salvación financiera a través del presidente, o el partido se convierte en el único recurso ante una situación crítica. Más vale malo conocido ¿En qué escenarios se podría ver perjudicado el partido republicano ante esta crisis? Estuve pensando largamente pero no se me ocurre ninguno. Si Bush no logra la inyección de recursos, el electorado coincide que fue su administración la que provocó esta situación y emiten un voto de castigo. Suena como un escenario creíble pero con el electorado estadounidense nada tiene que ver la razón. Normalmente es la emoción la que los gobierna.

septiembre 23, 2008

¿Para fomentar la ecología?

Un excelente ejemplo de cómo una muy buena intención puede degradar en algo ilógico e incoherente por decir lo menos.

Felipe Calderón anunció ayer que era momento de que a los niños se les enseñara ecología en las primarias y secundarias. Que debían ser los "guardianes de la tierra", y así los juró bajo protesta.

Luego nos informó que mandaría imprimir un millón doscientos mil libros de texto gratuitos para ser distribuidos entre niños de sexto de primaria y secundaria donde se les enseñarían los elementos más básicos de ecología.

Fuente: Excelsior

septiembre 19, 2008

En tiempos de crisis

Los tiempos de crisis significan para un gobernante dos cosas: el peligro de caer o la oportunidad de emerger de las cenizas. En el caso mexicano se han conjugado varias crisis, una económica que sacude a nivel internacional los precios de los productos pero sobre todo la confianza: confianza en el consumidor y confianza en las instituciones de crédito (en ambos sentidos, tanto del usuario a la institución como de la institución hacia el usuario). Aunque dicen que esta crisis no ha golpeado a México porque nuestra propia crisis de 1994 nos blindó (sic), la verdad que tendríamos que reflexionar más seriamente antes de suponer este escenario tan feliz.

Otra crisis, la política, desprende dos vertientes que a su vez tienen diferentes orígenes y por consecuencia destinos y objetivos. Una es la crisis en seguridad que ha tomado una nueva forma con el atentado el pasado lunes en Michoacán, pero que no deja de desprenderse de elementos relacionados con el crimen organizado. La forma más sencilla de diagnosticarlo es que cuando el gobierno federal decidió golpear la economía de la criminalidad, ésta tuvo que buscar nuevas formas de encontrar dinero, ahí la descomposición que hemos visto en los últimos meses en asaltos, secuestros, asesinatos de narcomenudistas y policías. La otra crisis política tiene que ver con una inconformidad ideológica con el gobierno actual. Y aunque más de uno ha cruzado la línea de la irresponsabilidad al señalar que se trata de un mismo movimiento desestabilizador (automáticamente clasificando como del mismo tipo a narcotraficantes terroristas que a una oposición política legalmente establecida y legitimada por el voto en 2006 de más de una tercera parte del electorado), la verdad es que tenemos que ser muy cuidadosos en el uso de las palabras y los términos.

Decía, antes de esta maraña clasificatoria, que el gobernante puede aprovechar este tipo de situaciones para capitalizar a su favor. Parece que ése es el objetivo del presidente cuando toma el micrófono y enfrenta retadoramente a los provocadores de esta nueva crisis. Así lo indica cuando declara que estos no son tiempos de flaquezas ni de regateos políticos. Totalmente de acuerdo con el titular del Ejecutivo. Una crisis de este tamaño exige una respuesta contundente del Estado, una que no deje dudas que si en algo están de acuerdo todas las fuerzas políticas es que los cauces terroristas no tendrán cabida en la relación entre gobernantes y gobernados, entre promotores y disidentes.

Sin embargo el riesgo que esto conlleva es grande. En la historia hemos visto situaciones similares, cuando una crisis despierta la furia del gobernante o de la elite. Se exigen cuentas, se exigen respuestas inmediatas y es cuando todo lo demás deja de tener importancia. Si la democracia se vuelve un estorbo entonces será tiempo de dejarla a un lado. Incluso la misma Constitución establece la oportunidad para que el presidente declare un estado de emergencia y las garantías individuales sean suspendidas en determinadas áreas o en la totalidad del país. No olvidemos, sin embargo, que el mismo documento obliga al presidente a rendir cuentas al Congreso una vez que la crisis ha sido superada.

La clave aquí está en que la crisis puede ser de un final indefinido ¿Cuándo terminará la delincuencia? ¿Cuándo se acabará el riesgo de un movimiento subversivo? ¿Cuándo si los precios de los alimentos siguen subiendo a pesar de que el petróleo ya viene para abajo? La inestabilidad política y la crisis económica representan un caldo de cultivo difícil de detener por cauces institucionales. El peligro no es necesariamente que otro grupo narcotraficante o terrorista asuma que tiene el derecho de prescindir de las vidas de los ciudadanos. En eso no queda duda que la respuesta debe ser contundente. Lo peligroso aquí es que nuestros gobernantes comiencen a confundirse de la misma manera que se han confundido algunos líderes de la opinión pública, presionando para que la unidad signifique silencio, que el respaldo a un Estado que está luchando contra la delincuencia organizada signifique sumisión y aceptación sin debate.

Cuando se habla de cerrar filas en torno al presidente no significa un cheque en blanco para todo lo que venga. El peligro es que por "seguridad nacional" luego se hable de una "necesaria reforma energética", o de una "impostergable reforma laboral" que elimine de tajo los beneficios del artículo 123 frente a las exigencias de las transnacionales por acabar con esos "estorbos a la competitividad" ¿Quién detendrá a un Estado policial que se detente como juez y parte, que siembre culpables y oculte la responsabilidad de policías federales en los secuestros que supuestamente está combatiendo? El mareo de poder puede provocar reacciones en nuestro presidente y su equipo de trabajo que estoy seguro hemos superado como sociedad hace ya varias décadas. El regreso de la violencia de Estado es una posibilidad que no debemos ignorar, menos justificar frente a otro tipo de violencias.

No, señor presidente. Darle apoyo en esta lucha no significa cerrar los ojos. No se deje confundir.

septiembre 17, 2008

Human[ismo]

Una expresión que se puso de moda, se fue y volvió ha sido ésta. Implica una forma de exageración (o exasperación) de lo humano de cada persona. Significa en cierta forma abandonar los accesorios y enfocarse en el ser, en lo que somos y podemos llegar a ser. Si nos esforzamos lo suficiente podemos llegar a un punto donde seríamos las mejores personas.

Ante este escenario hemos descubierto las mejores y más refinadas formas. Me gusta la música clásica al tiempo que leo un par de obras relativas al momento en que descubrimos que no somos más que falsas formas. Volvemos al pasado, intentamos rescatar lo bello que nos pareció alguna vez. Los recuerdos se vuelven historias, las historias leyendas y las leyendas se vuelven eventualmente libros de texto gratuitos.

Quizás el principal crítico al humanismo ha sido Friedrich Nietzsche. Lleno de frases contundentes y demoledoras contra la hipocresía de abandonar irónicamente lo que nos hace humanos para finalmente llamarnos "humanos civilizados", o simplemente ciudadanos, para traerlo a contextos más actuales. Volvernos contra nuestra naturaleza cruel para así llamarnos humanistas. No sé quién resulte peor, si el cinismo alrededor del pensamiento del filósofo alemán o la hipocresía del cristianismo que intenta ponerse por encima de la humanidad, por encima de nuestros pecados y mostrarnos la vida eterna, la felicidad absoluta.

El hallazgo de un elemento fundamental en esta discusión fue hecho por Michel Foucault a principio del siglo veinte. La descripción del castigo durante la edad media y cómo éste fue modificándose hasta llegar a lo que hoy entendemos como una visión clínica de la vida cimbró algunas partes de nuestra naturaleza, o al menos cómo la concebíamos. Todo este enmascaramiento se desenvolvía sobre dos ejes, uno educativo que iba en el sentido de modificar nuestra forma de ser y nuestra naturaleza (una visión ortopédica de la rehabilitación y de la misma recuperación de la sociedad, eso que llamamos "iluminación"), y otro escondido detrás de ese argumento, uno más oscuro. Lo que implica suponer esta máscara que hemos construido alrededor de la naturaleza tendría varias consecuencias. Primero, que no hemos avanzado hacia un estadio superior como algunos han afirmado. El ser humano civilizado sería un hombre prisionero de sus propios prejuicios. Saludar al vecino, no comer alimentos con grasas saturadas, acariciar a tu perro, nunca llorar en público. Segundo, que todas aquellas creencias en torno a las instituciones podrían bien ser un buen invento que nos ha mantenido entretenidos. Si el ser humano es un individuo cruel, entonces la crueldad ha mutado hacia un aspecto más sofisticado. No sólo se trata de pensar en el daño físico, sino buscar apoderarse de la mente del individuo. Llenarlo de ocurrencias hasta que llegue un momento en que se le olvide qué es lo que lo hacía humano: entonces habrá que reconstruir su identidad. Entonces tendrá sentido volverse a recorrer los libros que nos dieron sentido alguna vez, la música que nos engrandeció, la identidad nacional que en algún momento tuvo sentido (vamos exaltándola hasta que se vuelva religioso luchar y morir por tu patria), vanagloriémonos de los elementos más básicos como la cocina típica, un recuerdo de que toda globalización debe tener raíces en algún punto local. Vayámonos al espacio y recorramos sus rincones a través de un programita para descargarse gratis y aprender así nombres de galaxias que tal vez sólo existen en la imaginación de algún astrónomo aburrido de su trabajo de clasificar y anotar.

Los accesorios se convierten cada vez más en elementos recurrentes, aprendidos por la imitación, valorados por su inutilidad, descargados en las generaciones más jóvenes. Humanicémonos hasta el grado que dejemos de reconocernos. En cada momento tendremos una mejor oportunidad para convertirnos en identidades completamente reinventadas de nosotros mismos. No está claro quién inventa a quién pero sí quién atormenta a quién con prejuicios.

Si tuviéramos que elegir el momento en que dejamos de ser humanos para convertirnos en humanistas fue tal vez cuando descubrimos que nuestra naturaleza era algo aburrida y teníamos que llenarla como un árbol sentado sobre dos tablas en la sala de nuestra casa. Ahí estaba perdido entre los muebles cuando había la posibilidad de ponerle luces y colgarle unas cuantas esferas. El árbol tomaba vida irónicamente en el momento en que iba perdiendo su vitalidad. El ser humano podría encontrarse en una situación similar, a medida en que vamos avanzando en nuestro proceso de humanización nuestra humanidad palidece. Los recuerdos se vuelven difusos hasta encontrarnos con una identidad fragmentada.

El humanismo comienza a convertirse en una prisión del propio ser humano. Nos revela que los argumentos que nos hacían humanos probablemente también significan un accesorio como los mismos que el humanismo supuestamente repudia.

septiembre 14, 2008

Crónica de un delito frustrado

Ernesto


 

La tarde del viernes recibí un correo electrónico de una vecina de la colonia donde vivo desde hace un par de meses. El título no me indicaba nada de qué preocuparme hasta que lo abrí "Soy una vecina de la colonia [nombre suprimido] y no lo hemos podido localizar ya que el día de hoy intentaron robar en su domicilio". Venían algunos datos más que por obvias razones no puedo reproducir. Acto seguido, marqué a un celular que venía en el cuerpo del mismo correo, de mi vecino que había hecho el reporte a la policía y mucho más.

Hacía unos días que su segundo hijo había nacido. Apenas se acomodaba en su casa cuando por una muy buena casualidad su esposa miraba desde la ventana de su habitación rumbo a mi casa. Un par de hombres habían estado tocando el timbre repetidamente. Una vez asegurados de que no había nadie entraron en reversa a la cochera. Para el tiempo que la esposa le avisó a mi vecino lo que estaba pasando, él tomara una cruceta y corriera rumbo a mi casa, estos hombres ya habían derribado la reja de la ventana de mi sala. Éste iba a ser el cuarto robo en esta misma colonia con el mismo modo de operar. Llegar con un auto que no despierta sospechas, tocar como si se tratara de un vecino cualquiera o un visitante, estacionarse en reversa y abrir la puerta (aunque en mi caso iba a ser la ventana). Cuando el vecino llegó y los enfrentó nunca se imaginó que lo recibirían con una pistola. Corrió como pudo mientras estos hombres lo fueron siguiendo cuesta abajo hasta llegar a su casa. Los gritos de mi vecino hicieron que otros salieran y que este par tuviera que huir.

Algunos hechos sospechosos: tenemos un equipo supuestamente profesional de seguridad privada por el mismo problema que antes les describía. No es la primera vez que somos atacados aunque para mi efímero consuelo esta vez no lograron su cometido. En las otras ocasiones sí lograron vaciar las casas y salir de una colonia que supuestamente es privada, que sólo tiene un acceso. En las ocasiones anteriores el hecho de que un carro saliera lleno de aparatos electrodomésticos y muebles no despertó la sospecha del de la entrada. Su excusa, que como es una colonia nueva, todavía hay vecinos trayendo y llevando cosas. Cuando mi vecino y otros fueron a la caseta, tristemente no sorprendió a nadie la inoperancia de nuestra seguridad. No habían tomado nota de las placas ni la identificación de los delincuentes. Ni siquiera lo habían detenido pues la pluma que controla el acceso había estado levantada "por reparaciones". La persona que en ese momento debía estar en la puerta dijo no haber visto nada porque estaba calentando su "lonche". O se trata de tantas casualidades que daría risa, o algo extraño estuvo sucediendo aquí.

Un elemento más a anotar en esta situación es que el delincuente que persiguió a pie a mi vecino, a palabras de él, tenía una forma de operar que no corresponde con un delincuente casual. La forma como corrió cuesta abajo con la pistola siempre apuntando al suelo, la forma como se protegió con la puerta derecha del vehículo que nunca cerró para protegerse de un posible ataque, todo indica entrenamiento. No quiero asumir qué tipo de entrenamiento pero se los dejo a su interpretación.

Estoy seguro que no es una situación especial. En muchas ocasiones hemos sido testigos donde la autoridad termina siendo la mayor amenaza a la sociedad. Ya sea que se trate de una desafortunada y muy sospechosa serie de incidentes entre autoridad, seguridad privada y delincuentes, o que se trate de una deliberada colusión entre estos mismos actores, las cosas están para verdaderamente preocuparse ¿Cómo salir de mi casa ahora con tranquilidad cuando algo así pudo pasar a la una media de la tarde y ante los ojos de los que supuestamente están para tomar control de la colonia?

Levanté la denuncia correspondiente. Indiqué de mi fuerte sospecha contra los de la seguridad privada, les di el número de placa que alcanzó a anotar mi vecino, y les di otra información para que dieran inmediatamente con los responsables. La primera sorpresa fue que me dijeron que no podría denunciar por intento de robo pues no había evidencias. Sólo daños. El segundo, me dijeron que no harían la investigación correspondiente hasta que se turnara a la policía ministerial… el lunes. Esto después de tres horas y media esperando a que el delegado del Ministerio Público en Santa Catarina pudiera atenderme.

Si algo positivo puedo sacar de esta historia fue la respuesta rápida de mis vecinos. Si no fuera por uno de ellos que tuvo el valor de enfrentarlos, hoy estaría probablemente relatando esta historia desde una casa vacía. No fue la autoridad que una vez más me ha decepcionado con su actuación. No fue la empresa a la que puntualmente le pagamos cada mes para garantizar los elementos más básicos de información y reporte de situaciones anormales. No, fue un vecino que estuvo a punto de dejar a dos niños, uno recién nacido y otra de cuatro años, huérfanos de padre. Que tomó una cruceta e impidió que un par de delincuentes hicieran de las suyas con total impunidad y descaro.

Si en alguien tengo esperanza de una mejora es definitivamente en la sociedad. La autoridad se encuentra tan podrida por dentro que se ha convertido en nuestro peor enemigo. Si alguien hoy puede levantar la cara con orgullo es mi vecino. Nadie más.