diciembre 01, 2010

Impuestos y más impuestos

La semana comenzó preciosa para la política local. Por un lado los panistas hicieron la tarea de hurgar entre los archivos de la campaña de Rodrigo Medina (ésa que parece que sucedió hace décadas), para descubrir que en uno de sus debates televisados dijo fuerte y claro que no crearía más impuestos, mientras que ahora su disminuido secretario de finanzas salió a explicar porqué deberían de mantener la tenencia estatal para algunos modelos.

Por el otro, bastaría retomar algunas de las declaraciones de alcaldes panistas como Fernando Larrazabal o de su empleado que administra Santa Catarina para descubrir que sus reclamos y su loca idea de publicar un par de videos de guerra sucia vendrían a topar con pared. Mientras exigen al gobernador no crear nuevos impuestos, ellos se muerden la lengua cuando sus cabildos proponen la recatastrificación y el aumento en la tarifa para calcular el impuesto a la propiedad que está en manos de municipios.

La verdad del asunto es que hay puntos en común en ambas posturas: ambos necesitan dinero urgentemente después de que sus antecesores (en la mayoría de las ocasiones de su mismo partido político) los dejaron completamente endeudados hasta por las próximas décadas; y ambos necesitan venderle al electorado la idea de que no importa qué tan embarrado de mierda parezca estar, el otro huele todavía peor.

La dinámica irresponsable en la que se subieron varios gobernantes en la última década coincide con la decisión (ahora podemos jurar que no tan brillante) del entonces presidente Vicente Fox por repartir los excedentes petroleros entre los gobiernos locales ¿Cuál es el incentivo al dar más dinero a una burocracia obesa? Seguramente la de contratar a más compadres y gastar más en obras de ésas que lucen en la próxima elección. Cuando se acabó el dinero que mandaba PEMEX, resultó más fácil seguir pidiendo prestado para mantener la nómina que realmente tomar la decisión de cortar la obesidad que se creó artificialmente.

A lo largo y ancho del país, pero especialmente en aquellas gubernaturas donde los titulares tenían fantasías presidenciales, se comenzó a dar este fenómeno de gastar hasta lo que no se tiene, total que el siguiente en la fila cargaría con las facturas. Si queremos encontrar similitudes, ahí tienen el fenómeno de las pirámides, donde la evidente quiebra del sistema solo es rebasada por el hambre inconmensurable de quienes ahora portan la banda de gobernador, presidente municipal, tesorero, o cualquier otra figura en desgracia.

La fórmula parece inevitable. Por todos lados los jefes piden más obra y más gasto, o de lo contrario el electorado se dará cuenta de la terrible trampa en la que se metió el Estado o los municipios con esos contratos de bursatilización que hace siete años sonaban tan brillantes y audaces.

Mientras este par de partiduchos se desgarran las vestiduras por gritar más fuerte el foul del otro, tendríamos que tomar nota mental de lo ridícula e insostenible que resulta su postura. Subir impuestos parece la única salida al desmadre que han venido haciendo por los últimos años.

Triste paradigma: si lo suben, seguro pierde las elecciones. Si no lo suben, seguro pierden al Estado (o municipios).

noviembre 03, 2010

Las trampas de la transparencia

En México se aprobó en 2002 la ley federal de transparencia y acceso a la información pública gubernamental. En su propio nombre lleva el pecado que la he hecho convertirse en un ejercicio ostentoso e inútil, casi tanto como el propio instituto federal electoral. Las dependencias gubernamentales tienen dos excusas que utilizan frecuentemente, y que nos ha hecho caer en un proceso de desencanto general hacia su aprovechamiento.

Primera excusa: información que no se encuentra publicada. Si la dependencia considera que no tiene documentos publicados sobre la inquietud, fácilmente puede justificarse así. Aunque la información se trate de actividades que la oficina de gobierno realice, su respuesta sobre no tener publicado un documento que responda a la solicitud es suficiente para el IFAI y sus instancias locales.

Segunda excusa: información reservada. Cuando al gobierno y sus respectivas oficinas se les antoja, pueden lanzar la reserva de información sin ni siquiera tener que justificar el motivo, salvo para la memoria histórica una vez que termine la reserva de ley. Bajo este pretexto se han protegido solicitudes sospechosas y muy delicadas, sí. Pero también se ha aprovechado la reserva para denegar información que compromete situaciones que no tienen que ver con la seguridad del gobierno o de la nación, sino del funcionario que así será exhibido en actos de corrupción.

Lo detengo aquí porque se espera que ésta sea una de varias entregas sobre el tema. Creo que resulta elemental quebrar la noción de "transparencia" como una dádiva del gobierno a la cual somos merecedores cuando la gracia del funcionario así lo considera correcto. El IFAI ha sido hasta este momento un organismo obeso e irrelevante para la transparencia en nuestro país, pues la misma ley permite a las dependencias gubernamentales sacarle la vuelta a sus obligaciones.

Un ejercicio como Open Government debe pasar por etapas. De nada sirve si no existen las condiciones mínimas de rendición de cuentas, como obligaría una Auditoría Superior independiente, y una ciudadanía preocupada por el tema, ambos asuntos que espero desarrollar en otros escritos. Como vimos en éste, el asunto más básico de respuesta a las solicitudes se encuentra entrampado (literalmente), pues la transparencia sigue siendo voluntad graciosa del soberano y sus cortesanos.


 

octubre 21, 2010

¿Dónde quedó la Feria?

Esta broma me la contó un chofer de la ruta 130 respecto a sus compañeros de otras empresas que no manejan ánforas para depositar el pasaje. Cuando llegan los choferes a la central para reportar su venta y para entregar el dinero, los supervisores les piden que mejor entreguen lo que traen en la bolsa.

El asunto del transporte público da para muchos debates, pero uno de ellos tiene que ver con la forma de administrar los recursos ¿Qué hacemos? ¿Nos quedamos como estamos o implementamos medidas de prepago más eficientes y con las que se pueda tener más control? Lo segundo generaría beneficios para la administración de cada empresa concesionada y también facilitaría que el gobierno pueda cobrar correctamente los impuestos correspondientes. En esto hay un secreto a voces respecto a los recursos del transporte público y los grupos que se están beneficiando de su estructura actual.

Si en un lugar es fácil evadir impuestos y hacerse de un enorme capital que no pasa por controles normales es en negocios donde se maneja mucho dinero en efectivo. Estos recursos no sólo hacen que los gobiernos pierdan en cuanto a impuestos, sino también que grupos no institucionales se fortalezcan económica y políticamente. Aquí podríamos incluir desde sindicatos, camarillas y las relaciones políticas de los involucrados, hasta a la delincuencia organizada que extorsiona a estas organizaciones.

El incentivo que se está buscando con esta medida no sólo atraviesa la comodidad del usuario al no tenerse que preocupar si trae cambio o no, o la seguridad de los choferes que constantemente son asaltados en sus recorridos. También seguramente estuvo en la mente de los que planearon, y luego promovieron al poner un costo diferenciado, el hecho de romper con estructuras horizontales que se han beneficiado ilegalmente de estas fugas en las concesiones de transporte público.

octubre 20, 2010

Bondades del federalismo fiscal mexicano

Dos lecciones de que a final de cuentas los candados a través del sistema de redistribución fiscal funcionan. Ambos sucedieron esta semana y ambos deberían de haber sido espectaculares de ocho columnas.

El pasado martes se confirmó con la Ley de Ingresos aprobada en la Cámara de Diputados que el IVA se queda en 16%. Anteriormente había habido gritos y amenazas de parte del PRI de que harían todo lo posible por derrumbar la injusticia que ellos mismos aprobaron el año pasado, supuestamente por un acuerdo electoral con el presidente que no respetó. El movimiento de Ernesto Cordero fue un magistral golpe a tres bandas al recordarles que los principales afectados serían sus patrones, los gobernadores, pues bajarlo de 16 a 15% impactaría directamente en sus finanzas. Lo que comenzó como un leve carraspeo e indecisión ayer se confirmó como una triste broma del destino. A los priístas se les olvidó la injusticia y se acordaron de sus prioridades.

La segunda nota la da Nuevo León. Al cumplirse el plazo de reconstrucción de los puentes en Corregidora y en Santa Bárbara, el gobierno del Estado no tuvo más que reconocer su vulgar desidia para atender lo más básico. Tenían encima un nuevo logro espectacular de la SCT, quienes están a dos días de entregar el tramo que une Antonio L. Rodríguez con Gustavo Díaz Ordaz en tiempo y forma. El oso de ni siquiera haber podido terminar dos vados se lo quisieron evitar. Desde el domingo trabajaban a marchas forzadas sobre ambos lechos para terminar los vados, y ahora sí, despotricar que el FONDEN no les ha facilitado lo necesario para siquiera iniciar los puentes. Otro balazo a los pies, pues.

Lo que nos queda claro es que un par de movimientos de la Federación han hecho que los normalmente llorones gobiernos locales queden en evidencia de quiénes son realmente los responsables de muchos de nuestros problemas. O para que quede más claro, ese discursillo de que "es que el gobierno federal…" como que ya no se lo van tragando tan fácil los ciudadanos.

Triste semana para los priístas. Sigue su venganza.



octubre 19, 2010

Confianza

Salir a la calle podría ser un ejercicio de total suicidio. Un individuo más o menos preocupado por su bienestar pondría en duda la capacidad de sus vecinos para mantenerse en su carril, utilizar el espejo y la direccional antes de cambiarse y respetar los semáforos en rojo ¿o qué nos hace felizmente tomar nuestro automóvil, encenderlo y ajustar el cinturón de seguridad para manejar por las calles sin tanta preocupación?

Aunque nos declaremos personajes aislados y ajenos a los asuntos públicos, aunque digamos que lo peor que podríamos hacer es confiar en la sociedad para sacar adelante nuestros problemas, sea por los pretextos que sean, la verdad es que todos ejercemos un poco de ciudadanía al salir a la calle y depender de tantos factores fuera de nuestras manos para nuestra propia sobrevivencia.

El ejemplo que acá pongo sobre una actividad tan simple como es manejar pone en la mesa el hecho de que somos inherentemente ciudadanos, antes que cualquier otra cosa. Nuestra percepción se construye alrededor de las percepciones de quienes comparten el espacio con nosotros. Salir a la calle y comenzar a caminar, suponer que el de enfrente no se lanzará sobre mí para arrebatarme mis bienes, depender de que los servicios que nos proporcionan distintos negocios tendrán una calidad al menos suficiente para no perder la vida. Ejemplos sobran.

Es una buena noticia que hasta el individuo con mayores tendencias ermitañas, con menos confianza en sus vecinos, y con más comentarios sarcásticos sobre la inutilidad de la participación ciudadana, hasta él todos los días nos da la mejor prueba de que es un ciudadano más. Basta verlo manejar y suponer que el carro que está a punto de llegar a la esquina se detendrá por una luz roja. Y lo más impresionante es que efectivamente se detenga y todo siga funcionando.

octubre 11, 2010

Buganvilia

Las ramas de esta singular planta se endurecen rápido y se vuelven espinosas. Sus días de tallos tiernos apenas y recorren la superficie para convertirse en fuerte madera. Al final de cada una de sus terminales podemos encontrar flores que pueden convertir un desolado paisaje en uno de brillante explosión de colores.

Todos lo hemos visto alguna vez, esas paredes convertidas en colores pastel, los pétalos que se desprenden y también llenan el suelo de alegría. Resulta interesante cómo estos tallos, a pesar de su dureza, dependen de una guía para seguir su camino. Las paredes, rejas u otros árboles son para ellas la oportunidad de subir, incluso al grado de superar el nivel de los techos, dejarse ver desde el cielo como manchones rosas, naranjas o blancos.

La buganvilia tiene una enorme capacidad para mostrar belleza y crecer fuerte en entornos difíciles, pero requiere de bases que le permitan que sus raíces también se afiancen y se endurezcan. La guía sobre la cual puedan levantarse es una de las claves en su vida, la diferencia entre ser un simple matorral y un árbol enorme. Los jardineros lo saben y recomiendan que se les construyan enrejados alrededor de su tronco. Finalmente las rejas quedarán escondidas por las flores que se esparcirán por toda la planta.

Nuestras manos están atadas a los injertos de una buganvilia que apenas comenzamos a ver crecer. Dependemos de varios factores para florecer, pero al menos no podemos perder de vista la ubicación donde seremos sembrados ¿tenemos un árbol fuerte creciendo a nuestro costado? ¿hay alguna pared o rejilla que nos permita subir? ¿seremos simple matorral o nos atreveremos a ser un sólido árbol?

La ciudadanía no podrá crecer sin el Estado, so pena de convertirnos en una buganvilia apenas visitada por algunos insectos. La soberbia puede matar a nuestra planta. A final de cuentas, si somos suficientemente hábiles, nuestras flores podrán cubrir el entramado de tallos y guías que nos han permitido llegar alto. Alejarnos, o pretender que podemos solos, nos hará vernos chaparros frente a otros árboles que siguen creciendo en fuerza y en capacidad.

octubre 06, 2010

Un pueblo rojo

Esta mañana desperté con la inundación roja en Hungría. Resolví pasar la página y sólo hasta el mediodía revolví de nuevo el periódico. Lodo convertido en desgracia, elementos tóxicos que transforman el panorama de un tono sangriento, literal.

La rutina se vuelve asfixiante, pero a la vez también constituye uno de los poquísimos elementos que le dan cordura a una vida construida sobre pequeñas fórmulas que funcionan por su frecuente repetición. Poner el despertador a las 6 y media sólo para dejarlo sonar hasta el momento en que se entreteje con algún sueño de esos que se aferran a la fantasía. Quebrar la tranquilidad emocional con las primeras gotas heladas de la regadera sin que necesariamente terminen de despertarnos. Mirar fijamente hacia afuera con un tazón de cereal barato que sólo se come por la comodidad parsimoniosa del ejercicio digestivo.

Un pueblo convertido al rojo se vuelve una noticia espeluznante, pero a la vez necesaria. Es similar a la sensación en el fondo del estómago al mirar las fotografías de Veracruz bajo el agua, o Oaxaca entre el lodo, o aún más emocionante, Monterrey bajo las balas de dos o tres bandas que parecen no tener el menor ánimo de dejar de despilfarrar sus recursos en una guerra idiota. La sucesión de desgracias se vuelve lo único que nos va sacando de un estado letárgico insoportable.

Pero esta vez es un color carmín que inunda todo el panorama. No solo es la noticia que viene a sumarse a los incendios en California o los tornados en Mississippi. Es el trasfondo artístico de la nota. Es descubrir seres humanos que de cintura para abajo parecen víctimas de un ejercicio básico de Paint. Click, rellenar figura con el color seleccionado ¿está seguro de querer guardar los cambios hechos? Sí, seguro. Si no, no lo estaría haciendo. Son los caminos invadidos por la tortura monocolor frente a la diversidad que está escondida para otro día.

Me aburro. Quedo en espera del próximo evento que me haga reconsiderar mi existencia, y esa sensación de que nada puede sorprenderme ya.

septiembre 23, 2010

Limpiando la casa

El Proyecto de recuperación de la Colonia Independencia en Monterrey tiene un significado especial para la ciudad. No sólo se trata de un espacio que fue colonizado por bandas del crimen organizado ante el abandono de la autoridad y de la sociedad misma. Se trata además de la oportunidad que el gobierno está buscando con desesperación para recuperar su imagen ante los constantes embates de la opinión pública por el pobre desempeño que han mostrado hasta este momento. Por ello es importante no perder de vista los detalles de este enorme objetivo.

Un espacio originalmente habitado por familias de trabajadores que laboraban para la Fundidora de Acero Monterrey y que fue bautizada como San Luisito por el origen de sus pobladores, fue víctima de la urbanización y quedó atrapado entre enormes avenidas de alta velocidad al norte, y la Loma Larga hacia el sur. La quiebra de la empresa que los empleaba en 1986 generó que sus trabajadores e hijos tuvieran que comenzar a buscar por cuenta propia cómo hacerse de ingresos. Muchos de ellos hábiles en el uso de maquinaria pesada pudieron establecer talleres de diferentes actividades que hasta la fecha sobreviven, pero también otros quedaron a la deriva y con un futuro incierto.

La inversión para recuperar este espacio por supuesto que es aplaudido, pero debe tener un plan más profundo que simplemente la construcción de parques y centros deportivos ¿de qué le servirá a un joven dedicarse al deporte si esto no viene aparejado con un robusto programa de becas deportivas? sólo por poner un ejemplo. La privatización de las canchas del Río Santa Catarina vinieron a agravar aún más una situación que de por sí ya era complicada. La negativa de la Comisión Nacional del Agua para permitir su reconstrucción hace evidente la urgencia por este esfuerzo.

Será muy importante no tomar la salida fácil de culpar de todos los males a las zonas marginadas, como si el resto de la sociedad regiomontana no estuviera siendo abierta partícipe del clima de corrupción e impunidad. Las encuestas sobre cultura de la legalidad no presentan una diferencia significativa entre distintos estratos sociales o niveles de educación cuando se les hacen preguntas relativas a la oportunidad de cometer un ilícito si se trata de ayudar a un familiar o proteger el patrimonio propio. El problema es mucho más grave, profundo y generalizado de lo que se piensa. Recuperar la Colonia Independencia tendrá efectos positivos a largo plazo, pero no podemos caer en el simplismo de pensar que los más desfavorecidos son los que tienen a la ciudad volteada de cabeza. Ni tampoco pensar que sólo con la inversión en infraestructura el problema se resolverá automáticamente.

agosto 30, 2010

Éxodo

La cobardía se define como la degeneración de la prudencia. La mañana del lunes desperté con una frase en mi cabeza escrita por Lorenzo Zambrano: Los que se van de Monterrey son cobardes.

La ciudad se encuentra en pleno éxodo. Para quienes han puesto atención al segundo texto del Antiguo Testamento podrán recordar que la principal razón para el movimiento masivo del pueblo elegido no fue encontrar un lugar mejor, sino huir de sus demonios. La salida del hogar resulta así no una aspiración, sino una única y dolorosa alternativa. Uno sale de casa no porque quiera un mejor futuro, sino porque el que se tiene enfrente es insuficiente. Parece un juego de palabras pero no es lo mismo.

Monterrey se encuentra secuestrado. Se ha vuelto el nudo del conflicto entre las distintas bandas criminales. No es únicamente el espacio o las posibilidades para transportar, son los consumidores cada vez más adictos y con inmejorable poder adquisitivo, la serenidad y tolerancia de las autoridades frente a los niños bien de la ciudad. Su demanda provocó una oferta, pero esta competencia no tuvo reglas.

No es sólo el éxodo de las familias pudientes al otro lado de la frontera o, irónico, a la Ciudad de México por motivos de seguridad. Es también el éxodo de los mortales de sus rutinas normales. El sábado fui a comer a un restaurante de mariscos en Santiago que en otro momento habría tenido que esperar para ser atendido. Ese día éramos los únicos comensales quizá con otras dos familias. Es el éxodo de nuestros pensamientos, que ahora sólo rondan asuntos de inseguridad y paranoia. Es la dolorosa decisión de dejar al ser y sus actividades que le daban identidad.

Yo no sé si se trate de un asunto de cobardía. Encuentro tantas reflexiones y explicaciones en revistas, periódicos y redes sociales que podríamos encontrarle una buena razón a cada una de ellas. Sí creo sin embargo que la salida de amigos y conocidos de la ciudad no puede ser una buena noticia, ni para el que se va ni para el que se queda. El desmembramiento de una sociedad y su desprendimiento del lugar donde se desarrolló lo dejará amputado emocionalmente. Las historias que rondan en libros y testimonios de individuos que tuvieron que dejar sus países en los tiempos de las dictaduras son reveladores. Tomás Eloy Martínez escribió un libro lacerante que fue publicado poco antes de su fallecimiento. Purgatorio contaba la historia de una mujer que huyó de la dictadura argentina y que dedicó la mayor parte de su vida para intentar encontrar a su esposo desaparecido por los militares. Habérselo encontrado en un café neoyorkino, conversando tranquilamente y a la edad en la que ella lo dejó de ver, la devolvió a la vida. La ausencia de los seres amados y del espacio de vida dejan al ser humano en un purgatorio, en una espera perpetua que no se rompe sino hasta recuperar lo perdido.

Los que se quedan se enfrentan a un lugar desolado. En teoría son los valientes o los que no tuvieron la opción de abandonar el barco mientras aún se podía. Viven intentando mantener las rutinas que los aferren a lo que antes era su vida. El resquebrajamiento se da paulatinamente, no sólo por la ausencia de los que se han ido, sino también por el desfiguro del panorama. El molde del recuerdo deja de caber en la mañana siguiente.

No creo que el éxodo sea inevitable. Se requiere un despertar que aún no se ha dado. Hemos caminado (no sé si cobardemente) de un lado a otro, intentando sacarle la vuelta a los problemas, desde las balaceras hasta la ineptitud y complicidad de las autoridades. Pero no sólo eso, también hemos intentado no ver la complicidad que nosotros mismos hemos creado alrededor del crimen organizado. Los que ahora abandonan la ciudad lo hacen a sabiendas de que este lugar se está pudriendo. La enfermedad requiere anticuerpos, pero éstos han optado por esconderse, huyendo o quedándose.

agosto 24, 2010

Asuntos de familia

La muerte del alcalde Edelmiro Cavazos tiene varias líneas de investigación. Desde aquéllos que sostienen que sólo tuvo que ver con una lucha entre bandas por el control de la plaza, hasta los que afirman que fue con la intención de calentar una plaza que, sienten unos, ya no se la podrían arrebatar a los otros.

Desde que comenzó la disputa abierta entre el cártel del golfo y los zetas hace un año aproximadamente, se supo que los primeros habían hecho una serie de alianzas que casi les garantizarían el triunfo: el cártel de Sinaloa y los de la familia michoacana. Del otro lado, la enemistad entre los Beltrán Leyva a raíz de la traición del Chapo en 2007 los hizo acercarse a los zetas para enfrentarse a sus antiguos aliados. Parecía que la cosa estaba pintada para una rápida desaparición de los dos hijos desobedientes. Recordemos que los zetas provienen de una escisión del cártel del golfo, y los Beltrán toda su vida crecieron bajo el cobijo del cártel de Sinaloa.

Muchos de los sangrientos enfrentamientos que hemos sufrido en este año tanto en la zona de la Laguna y Chihuahua, como en Tamaulipas y Nuevo León, tuvieron que ver con una disputa en dos vías: por un lado mantener las plazas que proveían de recursos económicos a las bandas a través del tráfico de droga, los secuestros y las extorsiones, y por el otro calentar la plaza del opuesto. Este último término es conocido entre los miembros del crimen organizado como la deliberada provocación de la autoridad en las plazas de la banda opuesta para enfrentar a la sociedad con su gobierno y así exhibir las complicidades de éste último con la banda criminal enemiga.

Parecía que la intención de los del golfo y Sinaloa era quedarse con Nuevo León. Los primeros enfrentamientos fueron fuera de esta plaza. Mantuvieron estrecha comunicación con las autoridades al grado que se corrió fuerte el rumor de que hubo una instrucción de dejar hacer a aquéllos que se identificaran en los costados de sus unidades con tres letras correspondientes a las iniciales del cártel del golfo.

El secuestro y asesinato de Edelmiro puede tener muchas explicaciones y probablemente sea muy pronto para aventurarse a defender una de ellas. Sin embargo dos eventos posteriores pueden dar algo de luz sobre qué sucedió. Por un lado está el aseguramiento de una quinta en Los Cavazos con armamento suficiente para derribar helicópteros y el arresto de cuatro delincuentes pertenecientes a la familia michoacana, quienes luego confesaron ser los perpetradores directos del crimen junto con los policías municipales como cómplices. Por el otro, la casa que fue reventada en el poniente de San Pedro el lunes pasado, en donde tenían secuestradas a seis personas y sí, los secuestradores pertenecían a la familia. Seguramente los primeros atrapados hablaron sobre la casa de seguridad a cambio de una pena más cómoda.

Si tuviera que aventurar una explicación, diría que la familia michoacana, aliada del cártel del golfo, deliberadamente asesinó a Edelmiro con la intención de calentar la plaza para los zetas, contra los que poco han podido hacer por sus alianzas corruptas estratégicas que aún sostienen con gobiernos municipales y locales de Nuevo León, Coahuila y Tamaulipas. Por más amenazas, incluyendo el asesinato de candidatos y granadas a corporaciones policíacas, los zetas se han mantenido en el corazón de estos gobernantes que les han asegurado la sobrevivencia frente al embate violento de los sinaloenses y los del golfo ¿por qué esa lealtad cuando pudieron haberse deshecho de ellos? Seguramente asuntos de familia de los que poco podremos enterarnos los mortales.

Pregunta incómoda: ¿por qué los zetas le muestran tanto respeto al Diablo Fernández, personaje que abiertamente ha reconocido tener guardias blancas en la ciudad para eliminarlos? Eso de llevarle los cuerpos a la puerta de su negocio parece más una ofrenda de amistad que una provocación, después de todo cuatro de los seis agresores sobrevivieron al levantón.


 

agosto 02, 2010

El hilo de la injusticia

(Publímetro). El uso de presos de la cárcel de Gómez Palacio para servicio de delincuentes en Torreón provocó escalofríos en la opinión pública los últimos días. Esto ha dejado a la sociedad con la verdad frente a sus ojos: los espacios de readaptación social que ya sospechábamos se encontraban completamente infiltrados por el crimen organizado es también donde se reclutan a los mercenarios que hacen el trabajo sucio de las bandas criminales. Irónicamente con nuestros impuestos estamos alimentando y vistiendo a los mismos que luego en la noche saldrán a dejarnos una ofrenda de cabezas en la plaza principal.

Yo me pregunto cómo sentirá en este momento un funcionario del ministerio público o un juez. Suponiendo que han hecho su parte al integrar el caso y llevar ante un tribunal al sospechoso. Al declararlo culpable, que sólo sucede en el 5% de los delincuentes, éste pasará un trámite administrativo que le garantizará techo y comida, además de un trabajo muy bien remunerado: seguir asesinando sin problemas.

El hilo que mantiene unido a un Estado está en la confianza entre autoridades y ciudadanos. Las lamentables noticias que escuchamos la semana pasada abren otra zanja en esta relación pues deja sin sentido mucho del trabajo de procuración de justicia en nuestro país, si con sólo corromper a la directora de un penal se puede disponer de miles de matones que no tienen nada que perder.

La respuesta del Estado frente a esta crisis debe ser contundente o puede volverse una enfermedad que contagie a la sociedad ¿Denuncio? Si hasta en el mejor y distante escenario que el culpable llegue a la cárcel, éste podrá siempre salir a matarme y volver para el desayuno. Terribles noticias para nuestro país.


 


 

julio 30, 2010

Agenda de apuntes latinoamericanos

Un buen amigo y colega politólogo acaba de iniciarse en esto de los blogs. Los invito a que visiten su sitio, lo pueden encontrar en la lista de "One Stop Blogging" de la derecha.

Felicidades, Carlos.

julio 29, 2010

Enamorados de nuestros narcos

La verdad es que nos gusta vivir así. Nos emociona ver en los periódicos y noticias las últimas notas sobre los sicarios que rafaguearon en tal o cual calle, entre más transitadas mejor. Nos volvemos locos de la envidia ante la última prueba del gobernador que usó los fondos públicos para promover a su favorito (y ganó), o qué decir de aquél que estaba encargado de los proyectos estratégicos del Estado, y que tanto se robó que las obras se las llevó el huracán, pero hoy nadie se acuerda de cuando él estaba al frente. Cuando la cervecera mitad holandesa y mitad hija de puta nos anuncia que con todo y los riesgos naturales y el impacto social, su capricho es que el estadio se haga ahí donde ella había dicho, no hacemos más que gritar de la euforia. Pensamos que apoyar a la cervecería y a su proyecto es como tatuarnos el logo de los Rayados en el pecho.

O esto es verdad o no entiendo cómo explicar lo que veo todos los días. Nuestros gobernantes siguen ganando elecciones con amplios márgenes. Si el partido político se burló bufónamente de nuestra confianza, no importa. En un descuido el que llega se acuerda que estuvimos juntos en la facultad y me da chamba o al menos me deja comprar ese terreno en zona protegida para construir mi casa de cuatro pisos y alberca. Nuestros medios de comunicación siguen haciendo negocios redondos con nuestro morbo por ver las notas rojas cada vez con más fotos y videos que no dejan escapar un milímetro de la acción. Entre más masa encefálica quede expuesta mejor, pues más visitas habrá y más comentarios contra el gobernador tendrá. Nuestros agentes de tránsito siguen cobrando en la nómina de los zetas, pero cuando nos detienen por pasarnos un alto hasta de usted les hablamos mientras les pedimos nos echen la mano. O cómo explicar que ante las amenazas del líder de la CTM de que le guste a quien le guste, él volverá a ocupar el lecho del Río Santa Catarina para sus puesteros ilegales, no hay una reacción por parte de los organismos intermedios o de los de la sociedad civil. Nada más es cuestión de meses para que los volvamos a ver como si nada hubiera pasado.

O nos gusta la mala vida y los placeres que ésta conlleva, o no me explico el comportamiento del mexicano. Yo no me trago ese cuento del ciudadano desencantado que es prisionero de los grupos de presión y de la delincuencia. Para que estas cosas sucedan se necesita de dos tipos de persona: la que abusa y la que disfruta de las migajas de ese abuso. Víctimas no hay en este cuento, pues habría más reacciones por parte nuestra.

La única explicación que se me ocurre es que esta vida nos deja algún tipo de beneficio. Nos encanta que el perfil del político corrupto porque en él vemos reflejadas nuestras más oscuras aspiraciones. Vemos con amor y seguimos con precisión los relatos y las aventuras de nuestros nuevos héroes nacionales, llamados por la prensa como sicarios, miembros del crimen organizado o narcotraficantes. Nos sabemos con memoria fotográfica sus nombres, apellidos, corridos y a qué autoridades tiene en la palma de su mano, su valentía nos llena de orgullo. Si las empresas televisoras, telefónicas y de transporte abusan de sus clientes, nos quejamos pero no dejamos de consumirles porque somos adictos a la drogacola y ni qué decir a la novela de las cuatro donde sale el papucho en turno. Vociferamos contra Elba Esther porque nos tiene jodidos como nación, pero tan pronto salgo de la escuela normal ya estoy aplicando para entrar al sindicato, o si tengo palancas, heredar la plaza no me causa ningún conflicto, al contrario.

Cuando lloramos por lo mal que está nuestro país sólo lo hacemos para encontrar en el otro un comentario similar que vaya alimentando nuestra cómoda posición. Si, es que los políticos, los del sindicato, los empresarios, los delincuentes; por eso el país no puede avanzar. Y así podemos seguir justificando nuestra propia mediocridad como personas, nuestra falta de acción. El mundo conspira, por eso es mejor seguir pasando la vida en este mundo de caricatura que todos alimentamos.

Nos gusta estar así porque hacer las cosas bien implicaría el doble de esfuerzo ¿quién le quiere entrar? ¿quién quiere romper estos nudos y vericuetos que tantas ganancias nos dejan? Mejor no le muevas mucho. Si el país sigue funcionando, para qué le buscamos.

julio 23, 2010

Nuevo Laredo no existe

La mañana del viernes escuchaba a Carmen Aristegui relatar la situación en Nuevo Laredo, ésa que todos menos los que la están sufriendo debemos aceptar a través de los rumores. Se disculpó públicamente porque, dice, los corresponsables de MVS y sus fuentes ya no quieren relatar lo que está pasando en la ciudad. A partir de eso, lo que sucede debe construirse a partir de rumores que no son confirmados ni desmentidos por la autoridad.

La labor de comunicar se vuelve caótica cuando los grupos están más interesados en perjudicar los canales. Supongo que quienes apuestan a esto tienen como objetivo que la falta de información alimente rumores catastróficos que de cualquier manera no podemos saber si son ciertos o no.

El martes teníamos un muy interesante debate en el programa de radio. Una de las chicas que nos acompaña citó a Naomi Klein y su doctrina del Shock. Destaco esto porque uno de sus elementos explicativos es muy contundente, y así lo dije al aire: el miedo no te permite pensar. Si alguien te desorienta lo suficiente como para que estés más preocupado por sobrevivir que por el resto de tus necesidades e intereses, entonces aquél que propició esa confusión estará en posibilidades de tomar ventaja suficiente sobre ti. El miedo aturde, y en el miedo se puede operar con mayor libertad.

Enfrentarnos todos los días a la pregunta de qué tan graves están las cosas en el noreste del país nos obliga a tomar una decisión sobre al menos dos posibles opciones. Ignorar el mensaje y seguir con nuestras vidas como si nada estuviera sucediendo, o tomarlo y buscar el encierro seguro en nuestros hogares, limitar nuestras excursiones a lo estrictamente necesario y contemplar detrás de la ventana cómo vamos perdiendo nuestras ciudades y vidas.

Cualquiera de las dos opciones nos enfrenta con una realidad terrible. Ignorar el peligro parece antinatural, pero asumirlo también nos pervierte de nuestra humanidad. Actividades tan simples como ir a trabajar o comer con los amigos se vuelven decisiones de vida. Los espacios o mundos de vida como los llamaba Habermas se trastocan al grado que debemos pedir permiso a nuestra conciencia para siquiera atrevernos a dejarnos ver.

Los medios podrían cumplir con una función estabilizadora de esta situación paranoica, sin embargo parece que han sido víctimas de la misma indecisión y de los mismos fantasmas ¿Salir y hacer como que nada pasa o tomar el micrófono para relatar todo con el riesgo de perder la vida? Los medios tienen una tercera opción que es la que parece asumen la mayoría de ellos. Dejar de hacer. Cuando dejan de hacer desaparece su razón de ser. Entonces sólo se vuelven masas inútiles y asustadizas. Nuestra capacidad para comunicar o para recibir información se encuentra pervertida tanto desde la fuente como desde los multiplicadores.

La disculpa de Carmen refleja no sólo la preocupación de una comunicadora que se da cuenta de esta situación, sino también su incapacidad para imaginar una solución. Sin corresponsales, Nuevo Laredo hoy sólo existe por los rumores que se desprenden de las redes sociales. Y así, el miedo se multiplica.

julio 09, 2010

La coalición necesitará a López Obrador

Interesante momento de reflexión para la izquierda mexicana. Mientras más avanzan hacia la indefinición de sus paquetes ideológicos, más encuentran oportunidades para acceder al poder. Pareciera que el paradigma se encuentra entre abandonarse para ganar, o perder para poder seguir existiendo.

El pacto entre Ebrard y López Obrador está roto después de los triunfos de la coalición en Puebla, Sinaloa, Oaxaca y presumiblemente Durango después de las impugnaciones y veredictos correspondientes. López Obrador apostaba a un fracaso rotundo para así poder recuperar al PRD, sin embargo las cosas no le salieron como pensaba. El triunfo ha fortalecido a Jesús Ortega y a Camacho Solís.

Parece natural que la coalición permita la llegada de Josefina Vázquez Mota al Estado de México al tiempo que Marcelo Ebrard se convierte en el abanderado para la presidencia, no sólo apoyado por el PAN y el PRD, sino también por el Nueva Alianza por la excelente relación que ha mantenido Camacho Solís con la maestra desde principios de los noventa, y porque el mismo Ebrard también trabajó en varias ocasiones para la lideresa del SNTE antes de ganar la jefatura de gobierno.

Pareciera entonces natural que la izquierda pueda despreciar el puritanismo de López Obrador y lanzarse con todo por el Estado de México y luego la presidencia. A final de cuentas el mismo Convergencia tendrá que dejar a un lado sus aventuras amorosas con el tabasqueño a cambio de una buena tajada del pastel. Sin embargo no puede perderse de vista un elemento importantísimo. A la toma de posesión de Gabino Cué estará invitado en primera fila Andrés Manuel López Obrador. El triunfo de Cué no hubiera sido posible sin la red de operadores políticos que López Obrador ha instaurado en Oaxaca. El Peje ha dedicado una muy buena parte de estos años a construir una plataforma de tierra suficientemente fuerte y cohesionada que pueda impulsarlo sin la necesidad de las televisoras u otros grupos de poder. Su apuesta es radical pero puede serle efectiva. En 2006 estuvo a punto de ser suficiente, aunque el desprecio a la maestra terminó costándole la presidencia.

La izquierda y la coalición misma no pueden alejarse demasiado de López Obrador, pues ellos ni con SEDESOL de su lado tienen una estructura para enfrentar los cacicazgos del PRI; ni tampoco éste puede hacerla sin Ebrard (y la maestra). De la decisión de rompimiento o matrimonio por conveniencia hasta que se llegue a un acuerdo suficiente para ambos lados dependerá la capacidad para derrotar a Peña Nieto.

La coalición hoy más que nunca necesita a López Obrador. Pero cómo negociar con un personaje que seguramente preferirá ver hundirse el proyecto antes que permitir que otro lo abandere. El síndrome de Cuauhtémoc Cárdenas vuelve a aparecer en el ambiente, y parece que la izquierda no ha encontrado el antídoto para esta enfermedad.

junio 07, 2010

En defensa de la policía municipal



La unificación de la policía en corporaciones estatales no debe ser tomada a la ligera. El papel del municipio debe ser respaldado, no abandonado a su suerte. Algunas razones que he escuchado para la unificación:

  1. La policía municipal no tiene la fuerza logística, técnica y táctica para enfrentar al crimen organizado. La respuesta sin embargo, no debería ser desaparecerla. Ésta podría cumplir funciones específicas muy importantes, como investigación e inteligencia, mientras que las fuerzas federales podrían ser un elemento de choque ante amenazas del crimen organizado. Una bestia sin ojos, por más fuerte que sea, está condenada al fracaso. El agente municipal conoce el terreno que pisa y a sus vecinos, el policía federal no.


     

  2. La policía municipal está coludida con el crimen organizado. Aunque se ha intentado presentar la imagen del policía municipal corrupto ante los medios casi hasta la náusea, la verdad es que el problema es transversal a todas las corporaciones. Lo que se debe hacer es mejorar el sistema de procuración de justifica, y que caiga quien tenga que caer, así se trate de un presidente municipal o un gobernador. Un elemento gravísimo de esta medida es que al quitarle la policía a los alcaldes, estos podrán ahora sí deslindarse completamente de la responsabilidad de seguridad en sus municipios.


     

  3. La unificación de la policía en treinta y dos corporaciones garantiza un mejor control para el combate a la corrupción. Estrechamente relacionado con el punto anterior, la unificación no garantiza por sí misma ninguna solución. Se ha intentado plantear que la academia de la policía federal sería la solución para aplicar exámenes y pruebas específicas de filtro. Sin embargo la policía municipal y federal cumplen funciones muy diferentes, y una sola academia no sería la solución. En su lugar propondría crear una academia de la policía municipal en donde todas las corporaciones deban acreditarse.


     


 

mayo 25, 2010

Amenazas desde el Cielo



En mi escrito pasado culpaba a los videojuegos de habernos hecho creativamente dependientes, aunque al final me desdecía afirmando que la culpa la teníamos todos. Buena respuesta, buena forma de evadir la cuestión. Cuando se culpa a todos, se culpa a nadie. Hoy quiero cambiar de parecer si me lo permiten, pues hay asuntos que nada más no están bien. Y conste que no hablaré de videojuegos, porque luego tendría que confesarles que tengo por lo menos seis meses que compré una consola de estas muy populares color blanco, y luego compré una de esas bandas de rock que me han tenido muy entretenido. También tendría que sincerarme y decirles que es para mí un orgullo presumirles que finalmente he llegado al nivel 70 del muy popular juego de las granjas. Y ni qué decir de la enorme cantidad de horas que pasé en mi infancia dándole duro al control del Súpernintendo, o disparándole a patos frente a un perro gordo y burlón. Ni que durante mi maestría estuve jugando como loco a popular juego de fútbol también de una consola muy conocida color negra que un buen amigo llevaba a mi casa los domingos mientras nos engullíamos media pizza del Costco cada uno con unos finos refrescos de cola y unos cacahuates garapiñados que vendían en el mercado frente a mi departamento. Mejor no entremos en esos temas.

Y les decía que cambio de parecer porque hay cosas en las que sí se puede señalar culpable, y no voy a señalar al programador de los videojuegos. Repito que ése es tema descartado. Hoy me preocupa mucho el poder que puede llegar a tener una voz sobre quienes escuchan por voluntad o por fuerza. Y podría nuevamente decir que sería culpa de cada una de los individuos que decidan escuchar y obedecer, pero hay voces que tienen más peso que otras, y esas voces deberían mostrar más prudencia. Cuando un obispo lanza al fuego un ejercicio estadístico que se hace en nuestro país para el bien de todos. Cuando un religioso llama a que la institución que hace el censo está obedeciendo a "no sé qué inconfesables intereses", ahí es cuando comienzo a tejer mis sospechas de que a algunas personas el enclaustramiento espiritual no les ha dejado nada bueno.

El debate de responsabilidades nuevamente se abre ¿es culpa de la Iglesia como institución tener a esos voceros tan brutos? ¿es culpa de los que cada domingo aportan algo para mantener esas agrupaciones y los que las administran? Aquí es cuando pongo en cuestionamiento mi argumento del escrito pasado, porque si señalo que todos somos culpables de los pésimos jerarcas que tenemos en la Iglesia Católica, entonces ya no hay hacia dónde señalar. Y bueno, con estos y otros incidentes que ha habido en esa asociación religiosa en los últimos meses ya debería comenzar a preocuparnos sobre quiénes estamos depositando nuestra fe. No porque se hagan llamar representantes de Dios tienen el derecho a abrir la boca cuando y como se les dé la gana. De la misma manera que se les pide a los militares que sean juzgados por tribunales civiles cuando cometen un error muy a pesar de sus fueros, así también podríamos bajar a algunos funcionarios de la Iglesia Católica de sus tribunales celestiales y comenzarlos a juzgar aquí por las cosas que hacen y dicen. La reclasificación de las religiones dentro de la encuesta del Censo obedece a un cambio poblacional en México que sí, definitivamente marca un declive en la preferencia por la opción "católica" que antes era la única que se marcaba con su etiqueta. Pero ¿es culpa del INEGI que la gente esté dejando de confiar en los jerarcas católicos romanos? Y ¿por ello tendríamos que obedecer cuando estos señores piden boicotear por no darles finas atenciones?

Aunque ahora salgan gobierno e iglesia dándose el abrazo de la paz ante los medios, la amenaza y sus posibles consecuencias a mí no se me olvidan. También podemos simplemente decir que se trata de la libre expresión de una sociedad democrática, donde un par de jerarcas se exaltaron y dijeron un par de imprudencias, y olvidarnos del asunto. Pero al menos de algunas voces deberíamos pedir más inteligencia, o para qué les confiamos tanto como nuestra vida eterna si van a salir con estas cosas.

mayo 19, 2010

De Mérida y videojuegos

Los videojuegos enajenan al ser humano, rompen con su interés por inventar la trama. Pervierten el deseo por construir a los héroes y a los villanos, escurren la posibilidad de que sea nuestra mente la creativa-creadora. Nos hemos vueltos consumidores de nuestras propias odiseas.

No estoy seguro si se trata de una campaña perfectamente planeada para romper con nuestra integridad, un complot mundial de las multinacionales para dejarnos sujetos a su voluntad y capricho, para convertirnos en consumidores pasivos y obedientes. Ésa es la salida fácil culpando al resto del mundo por nuestras desgracias. Si el maldito sistema nos ha sometido a este bombardeo, entonces tiene sentido nuestra apatía, nuestra obesidad, nuestra dejadez y conformismo. Todo esto porque somos víctimas de enemigos más grandes que nosotros, que apenas y podemos comenzar a vislumbrar.

El martes en la noche al escuchar a Horacio Guajardo en el radio hablando del ausentismo en las casillas en Mérida comencé a pensar que después de todo puede que no sea el maldito sistema, o que al menos éste no tenga toda la culpa. Al mirar mi entorno no encuentro sociedad civil activa luchando por sus derechos, sino más bien una suma interminable de tristes conformistas que apenas dan lo suficiente para pasar al siguiente día. No veo creatividad e imaginación sino más bien seres que se pasean por la vida como si no quisieran molestar a nadie.

"Toma la vida por los cuernos" dice un popular slogan de una marca de camionetas norteamericana. Yo creo que más bien nos hemos dejado llevar por el toro entre las patas y nos ha valido madre. Si nos encontramos en un momento tan decepcionante de nuestra política, no tiene mucho qué ver con lo que hacen los políticos, sino más con lo que estamos dejando de hacer nosotros.

Culpemos al sistema de nuestros males. Ahí tenemos cientos de villanos a los que podemos despreciar por sus abusos y violaciones. Sigamos disfrutando nuestra mediocridad mientras vamos sentados en el asiento trasero, y con una tendencia rápida para que nos avienten a la cajuela.

Mérida es el ejemplo más claro de que no son los abusos del PRI o su inminente regreso lo que nos tiene así. Que vuelvan a la Presidencia, nada será diferente. El problema ha sido que desde hace ya una década nuestra ciudadanía se durmió esperando que las cosas cambiaran por sí mismas. México hoy está muriendo asfixiado no porque alguien lo esté ahorcando, sino porque simplemente nos da hueva respirar.

Nosotros escogimos dejarnos encaminar por esta generación que prefiere el videojuego controlado que sentarse a imaginar un juego mejor. De esto no tiene la culpa ni el vendedor de consolas, ni el que diseñó los juegos. Es más difícil darnos cuenta que los únicos responsables aquí hemos sido nosotros.

mayo 10, 2010

Redes sensibles

En la última semana fuimos testigos de dos eventos aislados que resonaron entre los usuarios de estas dos de las plataformas más importantes actualmente. Las redes sociales Facebook y Twitter fueron víctimas de ataques cibernéticos que pusieron en entredicho no sólo su seguridad e integridad, sino también la privacidad de todos los que voluntaria o involuntariamente, comparten su información.

Facebook por un lado se vio comprometida en la información que los usuarios compartimos a través del servidor de Facebook Chat. Al entrar a la configuración de privacidad y utilizar la herramienta de "Previsualización del Perfil", al poner el nombre de algún amigo se podía ver no sólo las conversaciones abiertas que tuviera el usuario en ese momento, sino también los mensajes privados, los amigos que aún no había aceptado y sus actualizaciones.

Del lado de Twitter, la tarde del lunes súbitamente los seguidores de cada usuario desaparecieron, una de las monedas de cambio más valiosas en esta red social pues representa el grado de legitimidad y fortaleza que se tiene frente a otros. Los seguidores se han convertido en un elemento de prestigio en esta red social. Primero los seguidores desaparecieron, y luego se activó un gusano que permitía a los usuarios forzar a otros twitteros a seguir a quien activara el código sin tener su autorización.

Aunque supuestamente ambos casos se encuentran resueltos por el Staff de las respectivas organizaciones, las preguntas con las que inicié este escrito quedan al aire. Por un lado queda en evidencia que la fortaleza de las redes sociales ha hecho que se vuelvan en objetivo de los piratas cibernéticos. Por otro, la integridad de la información de los usuarios quedó expuesta y puso en evidencia que al parecer, al menos en el caso de Facebook, existen funciones que permitirían eventualmente a los patrocinadores a tener acceso a la información que supuestamente es privada ¿Hasta qué punto esta red social está comprometida con la privacidad? ¿Tiene sentido hablar de privacidad en una red que vive precisamente de la publicidad? Estas preguntas toman fuerza ahora que Twitter ha anunciado que está a semanas de activar un servicio de publicidad similar al de Facebook, y a semanas de se concretó un convenio en el que la información de Twitter ahora es parte del contenido de los buscadores más importantes del mundo.

Dos eventos aislados, demasiadas preguntas en el aire.

abril 29, 2010

La maduración del régimen panista

El periodo de sesiones que terminó oficialmente el viernes 30 de abril será seguramente recordado por dos eventos: la ley de competencia y la reforma a la ley de seguridad nacional.

Por un lado se impuso la urgencia del presidente para controlar a quienes seguramente serán sus adversarios en la contienda presidencial de 2012. La posibilidad de que grandes empresarios que en 2006 lo apoyaron ahora se alineen con Peña Nieto o quien quiera que vaya a abanderar al PRI es muy alta. La obsesión por jugar a los soldaditos aún contra los intereses económicos más simples como mantener la tranquilidad y la buena imagen del país no se lo van a perdonar ¿Cómo contenerlos? Una ley que le permita enjuiciar a empresas que realicen prácticas monopólicas, y que Eduardo Pérez Motta estará encantado de utilizar después de tantos años de intentos frustrados.

Por el otro, finalmente PRI y PAN han decidido impulsar la reforma a la ley de seguridad nacional que le dará certidumbre a las operaciones militares en labores de seguridad pública. La clave está en considerar una amenaza a la seguridad nacional las operaciones del crimen organizado. No resulta tan descabellado después de ver su capacidad de corrupción y de destrucción. La reforma también establece criterios importantes sobre la capacidad para decretar estados de emergencia aislados de acuerdo al 29 constitucional. La agenda aquí va con toda la intención de continuar la lucha ¿Por qué el PRI se ha prestado a semejante reforma? Seguramente tuvo que ver con una relación ríspida entre militares y algunos gobernadores que han sido señalados más de una vez de tener amistades peligrosas ¿Qué tanto aquí la SEGOB jugó el papel de cuate que se hace de la vista gorda a cambio de apoyo? Seguramente mucho. A largo plazo, esto resultará en su perjuicio pero al menos salvarán el pellejo en el corto.

En ambas se ve a un presidente que ha aprendido a jugar con las reglas formales e informales. Vemos en Gómez Mont a un interlocutor que no tiene temor de usar la mano derecha para ofrecer, y la izquierda para propinar un fuerte puñetazo. Vemos a un presidente que ha logrado también enfocar su energía en algunos puntos de su agenda antes que intentar resolver todo. Finalmente, vemos a un presidente cómodo en su silla, y donde los grupos de interés ya no tienen tanta capacidad para chantejearlo como era en un principio. Se ha consolidado el poder presidencial después de varios años de debilitamiento. Esto puede tener buenas y malas noticias, pero al menos este periodo de sesiones me deja esa impresión.

Esto puede tener un impacto inmediato en dos cuestiones: la agenda política y la agenda electoral. La política parece que seguirá apuntada de manera obsesiva hacia la seguridad pública y el sometimiento de los grupos de la delincuencia organizada, al menos hacia su debilitamiento. Por el otro vemos una agenda electoral fuertemente cargada hacia los hombres del presidente, no quieren cometer errores ni dejar algo a la incertidumbre. El estilo panista de gobernar está llegando a una maduración interesante. La pregunta que podríamos estarnos haciendo es si éste es compatible con los principios democráticos, o la transición no fue de un régimen autoritario a uno democrático, sino de uno autoritario a otro similar.

abril 20, 2010

La vergüenza como arma

El quarterback de los Acereros de Pittsburgh Ben Roesthlisberger descubrió que su talento no estaba por encima de las normas. Con todo y que el Big Ben le ha dado a esta franquicia dos anillos de Súper Tazón en los últimos cinco años, los Acereros han expresado públicamente no estar interesados en que siga siendo su mariscal ¿La razón? En una fiesta intentó sobrepasarse con una estudiante de la Universidad de Georgia.

Lejos de querer caer en un ensayo sobre moralidad, la verdad es que algo están haciendo de aquél lado que nosotros no estamos haciendo bien. La posibilidad de torcer la ley y salir airoso no sólo resulta en un cálculo matemático preocupante, sino que también nos provoca una extraña relación entre los tramposos y aquéllos que los admiran ¿Cuántas veces hemos tenido la oportunidad de romper la ley? Nuestra cultura lamentablemente está más inclinada para idolatrar a los listos que saben salirse con la suya que hacia los líderes que son ejemplo para su comunidad.

¿Cuándo habríamos visto en México a un atleta exitosísimo ser rechazado por su equipo (y el resto de ellos) por su comportamiento fuera de la cancha? En nuestro país estamos tan acostumbrados a las farras y los excesos de nuestros líderes morales, sus problemas con la ley, sus escándalos, que ya resulta inútil esta pregunta ¿Cuándo hemos visto a una comisión del deporte sancionar fuertemente a un elemento con esta conducta? ¿Cuándo hemos visto un pronunciamiento público que denosté los malos ejemplos? ¿Qué tanto nos importa que las personas que nuestros hijos admiran tengan una trayectoria intachable?

Extrapolar ahora resulta muy sencillo. Este comportamiento lo podemos ver en cualquier ámbito. Las personas con conductas rectas son ignoradas, los tramposos normalmente son los que ocupan las primeras planas en todo su esplendor, y los puestos más importantes. Ahí tenemos una lista larga de gobernadores y empresarios viviendo en matrimonios perversos, organismos gubernamentales que venden sus bases de datos a delincuentes en Tepito y nuestra respuesta es "pinche gobierno" como si éste se manejara por manos invisibles; tenemos un gremio de trabajadores de la educación que se burla en la cara del presidente y su actual secretario de educación mientras debajo de la mesa le prometen al PAN compromisos electorales en los Estados que se están jugando el poder ¿Más ejemplos? No acabaría este escrito con todo lo que podría exponer.

El problema es que no lamentamos estos hechos. Los consideramos parte de nuestra vida, suponemos que así tienen que ser las cosas. No nos percatamos lo sencillo que resulta cambiar nuestro entorno más inmediato. En Estados Unidos la vergüenza pública tiene más fuerza que cualquier ley. La intensidad del acoso social hacia aquellos individuos que se han salido de las reglas resulta devastadora. Hoy Ben Roethlisberger está próximo a recibir su notificación de suspensión, su carrera está prácticamente terminada ¿Nos falta mucho para aspirar a un país así? ¿Cuándo fue la última vez que admiraste a un tramposo por salirse con la suya?

abril 16, 2010

Es más simple de lo que pensamos

(Publimetro)


 

La seguridad es percepción. Mientras más nos mantengamos al tanto de ella, más inseguros nos sentiremos. Es como el paciente que pasa el día buscándose síntomas para finalmente encontrarlos.

Recurrentemente aparece en las encuestas sobre prioridades de la población la seguridad muy cercana al de la economía. Algunos han culpado a los medios de comunicación por la exageración de la nota porque se deja a un lado la labor de comunicar por aquélla de vender. El gobierno federal gasta millones de pesos en propaganda donde se vende como algo muy cercano a la liga de la justicia luchando contra la maldad. En el problema de la construcción de esta sensación paranoica todos hemos puesto algo del material componente. Salirnos de esta espiral debe partir de nosotros mismos y qué tanta atención le damos a eventos aislados para concentrarnos en las acciones que nos permitan sentirnos más seguros. La percepción de que más información genera más seguridad nos ha llevado a una psicosis donde siempre queremos estar seguros de qué banda se enfrentó con cuál, y cuántos muertos cayeron, si hay fotografías qué mejor.

La seguridad afortunadamente es mucho más simple que eso. La construcción de nuestra tranquilidad no tiene que ver con que sepamos de memoria los nombres de los delincuentes y cuáles son sus principales fuentes de recursos y quiénes sus aliados y enemigos. La verdadera seguridad se encuentra en nuestra banqueta con nuestros vecinos, junto a nuestros amigos, en el camino al trabajo y en el tiempo que dediquemos a conocernos unos a otros. Lo demás sólo sirve para que algunos medios de comunicación se hagan millonarios a costa de nuestros miedos.

marzo 23, 2010

Sin palabras.

Las declaraciones del Secretario de Gobernación el lunes fueron enfáticas: los estudiantes del Tecnológico murieron en el fuego cruzado cuando se encontraban del lado de los militares. No cabe duda, no es necesaria una investigación, ni siquiera que las autoridades universitarias, las estatales o el mismo ejército pidan disculpas por el incidente. No, ya todo quedó en los registros de tristes cifras sobre la guerra contra el crimen organizado.

Los ciudadanos, según instrucciones de la autoridad federal y estatal, debemos cerrar filas contra la delincuencia y en torno al gobierno. Los cuestionamientos serían casi una traición. De la beligerancia inicial de autoridades de la universidad afectada ahora pasamos a un silencio preocupante. Las protestas no han pasado de los grupos y las frases románticas en redes sociales. Los organismos intermedios, las iglesias, universidades públicas y privadas y las diferentes instancias de nuestra sociedad regiomontana han guardado un silencio tímido y cobarde frente a un hecho que no debe pasar desapercibido.

No quiero caer en el comparatismo hueco de decir lo que en París sucedió cuando dos jóvenes franceses de ascendencia marroquí fueron asesinados por la policía, la cantidad de huelgas y protestas que se sucedieron en la ciudad durante semanas y otras reacciones naturales frente a una agresión similar. La ciudadanía en cada contexto debe reaccionar según sus condiciones, su cultura y sus propios motivos. Sin embargo, me preocupa mucho la frialdad de nuestra comunidad, ya ni qué decir la juvenil y universitaria.

¿Qué papel debe jugar el joven y el universitario frente a esta situación? ¿Qué tenemos que hacer como sociedad? El silencio ni la indiferencia, mucho menos el miedo, son alternativas para una ciudad con el nivel de vida y de educación de nuestra ciudad. La vergüenza baja de la autoridad hasta cada uno de nosotros mientras toleramos que el fin de semana pasado quede como uno más para la nota roja.

enero 29, 2010

El gobierno haciendo la chamba del partido

Nos encontramos en una batalla ideológica como hacía mucho no teníamos en nuestro país. La severidad del autoritarismo hegemónico en el que vivimos durante el priísmo hizo que nuestra sociedad se enfocara irremediablemente en un enemigo en común, que era el propio sistema. Desde religiosos de derecha hasta guerrilleros de izquierda querían derrocar al poder, establecer las reglas mínimas de convivencia, para luego eventualmente aspirar a desarrollar la agenda política de cada grupo.

Parece que ya hemos llegado a ese segundo punto donde cada uno de los grupos comienza a apuntar su artillería no contra el sistema, sino contra el grupo ideológicamente opuesto. Estamos teniendo debates muy nutridos en aspectos económicos, de rumbo de país, de tipo de sociedad (qué tan tolerante o tradicional queremos como nación), entre otros. Esto es de celebrarse, pues finalmente estamos disfrutando la democracia en todo su esplendor, al menos en el ámbito del intercambio de ideas y de la deliberación pública.

Es natural que el gobierno al provenir de un partido (y por tanto de una ideología) defienda algunos asuntos en estos debates. Es evidente que en el plano social el PAN ha entrado de lleno para defender la familia tradicional. Tiene lógica, es su agenda y son los grupos que normalmente han apoyado a este partido para llegar al poder y ejercerlo como lo hacen. Es natural pensar que el PAN estará en contra de iniciativas de la izquierda mexicana como la libertad de decidir sobre la terminación de un embarazo, o sobre la posibilidad de adopción por parte de parejas del mismo sexo. También es natural que sus políticos y funcionarios públicos defiendan lo que creen es correcto, y qué visión tienen de nuestra sociedad.

Hay dos ejemplos, sin embargo, donde de la opinión se está llevando a acciones que no corresponderían al gobierno defender, al menos no con los recursos de todos los mexicanos. Una cosa es opinar y otra muy diferente es iniciar procesos de inconstitucionalidad por asuntos meramente ideológicos. Es el caso en que la Comisión Nacional de Derechos Humanos intentó el año pasado en contra de la iniciativa por el derecho a decidir de las mujeres en el DF, y el de la PGR intentando un proceso contra la iniciativa para la opción de adoptar menores por parte de parejas homosexuales.

Repito, es utilizar los recursos de todos los mexicanos para defender asuntos que le conciernen o preocupan sólo a un sector de la sociedad. Cuando el partido se erige gobierno, jura representar y defender a toda la nación, no sólo a los que votaron por ellos. Los recursos de inconstitucionalidad cuestan, y cuestan mucho dinero. Dinero que podría utilizarse de manera más provechosa, como por ejemplo persiguiendo, encontrando y encarcelando a tantos capos de la droga que se pasean cínicamente por pueblos y rancherías al norte del país, y en sus narices cuando van y disparan contra futbolistas.

Le corresponderá a la Suprema Corte dirimir este asunto, donde seguramente fallará (como lo ha hecho ya en repetidas ocasiones cada vez que el PAN y sus ideólogos intentan derribar reformas en el DF) en contra del recurso de inconstitucionalidad. No hay artículo de la Constitución que se esté violando en esta reforma, por donde le busquen. En ningún punto de la Constitución se establece que el mexicano tiene derecho a una familia tradicional compuesta de un hombre y una mujer. Busquen y verán.

Bienvenido el debate ideológico, nos hace falta mucha y muy profunda reflexión en tantos asuntos que dejamos pendientes por enfocarnos en derrocar al dinosaurio. Pero que se dé en los ámbitos y espacios que para eso han sido destinados.


 

enero 26, 2010

Pésimos intelectuales

La semana pasada se confirmó la intención de PAN y PRD para contender a algunas elecciones locales en alianza contra el PRI, y lo primero que hizo Beatriz Paredes al tomar la tribuna en el Foro para la Reforma Política es hacerle saber al presidente que nada pasará en las Cámaras. Bueno, esa actitud infantil ya la hemos visto antes en los políticos pero, ¿y los intelectuales?

El lunes y martes pudimos ver uno a uno a nuestros expertos en el tema de reformas a regímenes políticos, aquellos que tienen ya más de una década dando a conocer su "decálogo" revisado y mejorado. Lo que pudimos presenciar no fue un grupo de trabajo sino un lamentable desfile de egos con una muy buena dosis de soberbia y frustración.

Cada personaje que habló en la tribuna fue a defender su fórmula mágica. Que si son dos periodos en lugar de uno, que si reducimos en 100 legisladores en lugar de 200, que si la segunda vuelta causará peligrosas consecuencias porque polarizaremos al país, que si la movemos un poco a la receta dada por ellos mismos todo lo demás resultará terriblemente desastroso, ¡Que si las candidaturas independientes sólo servirán para que la ultraderecha se apodere del país! Basta por favor.

Reconocer su experiencia en el área no quiere decir que tengamos que tragarnos su egocentrismo desmedido. Que este foro sirva para una reflexión seria y no como una pasarela para demostrar cuánto saben de fórmulas de ingeniería constitucional.

A final de cuentas, lo más lamentable será que la clase intelectual sólo sirva como carne de cañón para derribar una muy buena iniciativa presidencial. Todas las propuestas son perfectibles, lástima que estemos aprovechando la ocasión para practicar nuestro deporte favorito como mexicanos. O para decirlo todavía más claro: no por pararse ahí a decir que todo está mal en la propuesta ustedes serán más respetados. Al menos no por mí.


 

enero 20, 2010

Tejido

La agresión contra una iglesia en Escobedo con pintas satánicas nos debe alarmar sobremanera. No se trata únicamente de un acto vandálico, sino que puede encerrar algunas reflexiones dignas de atención por parte de nuestra ciudad.

Si pensamos en la sociedad como un tejido entre individuos y grupos, el problema de estos ataques contra instituciones-pegamento como puede ser una parroquia en una colonia (desde las marginadas hasta las más opulentas), es que no sólo afectan a los religiosos, sino a todo el grupo que ahí se congregue. Podríamos medir qué tanta fuerza centrípeta (fuerza que viene de los alrededores hacia el centro) hay en cada uno de estos lugares: familias, parroquias, juntas vecinales, clubes deportivos, etcétera ¿Por qué un ataque contra esta iglesia? ¿Quién puede estar interesado en hacerlo?

En Monterrey y su área metropolitana funcionan esencialmente dos tipos de instituciones-pegamento: los clubes de fútbol y las iglesias. Podrá haber otros que sin duda ejercen una fuerte amalgama, pero estos no se reproducen sistemáticamente en toda la ciudad. Futbolistas jugando los sábados y domingos, y fieles creyentes los hay por toda la geografía regiomontana.

Atacar uno de estos símbolos tiene por lo tanto una doble connotación. Por un lado está el asunto evidente de un ataque no sólo a un edificio, sino a una religión. Las pintas muestran un desprecio casi caricaturesco hacia la religión católica. Símbolos satánicos pintados en las paredes parecen más una burla que un verdadero intento de ataque contra las creencias de muchos de los regiomontanos (o al menos quienes asisten regularmente a esa capilla). Sin embargo por el otro lado está también presente una agresión mucho más peligrosa. Se trata de un síntoma grave de desesperación. El mensaje explícito en uno de los rayones indica "¿dónde ha estado Jesús cuando lo necesitas?" ¿Qué significa una anotación de este tipo para un regiomontano promedio? ¿Cuánto de reflexión hay en esa expresión? La desesperanza de una situación tan crítica como la que estamos viviendo en esta ciudad genera actitudes de frustración que tienden a ser acumulativas y cada vez más explosivas.

Repito, no se trata de un ataque a una iglesia en particular, sino a un estado pasivo de la sociedad. La iglesia por lo tanto no viene a representar más que a un pegamento que tal vez ya no está teniendo tanta fuerza como lo solía tener. Una sociedad sin pegamento tenderá fácilmente a perder su tejido que le permite soportar precisamente los embates económicos y sociales asociados a una crisis económica como la que hoy vivimos, y sobre todo a los intentos del crimen organizado por desarticularnos como sociedad y apoderarse de nosotros completamente.

Puede tratarse de un juego y un simple robo. Pero revisando con detalle la psicología detrás de quien apuntó ese aerosol contra las paredes de la iglesia en Escobedo, podríamos preguntarnos ¿estamos haciendo lo suficiente para mantenernos entretejidos como sociedad?

enero 14, 2010

Haití

¿Qué pudo hacer mal un país para recibir tantas desgracias en tan poco tiempo? ¿Cómo se puede concebir algo de justicia divina cuando al país más devastado del continente le sucede un desastre de este tamaño?

Hace unos días una amiga me comentaba en relación con la próxima muerte de una muy querida señora, que las pérdidas de este tipo funcionan para unir familias, olvidar peleas, en fin, hacer que las personas recuerden qué es lo que los hace estar cerca unos de los otros.

¿Qué cosas buenas podemos rescatar de una crisis como la que seguramente veremos crudamente en los próximos días, cuando escaseé el agua y el instinto de sobrevivencia reclame en cada individuo olvidar el contrato social? Sin duda la hermandad mundial que nuevamente se ha visto pronta e incondicional.

Que la necesidad de los haitianos sirva para unirnos en torno a una desgracia, pero que no quede sólo ahí, sino también nos haga reflexionar sobre las diferencias que como pueblos latinoamericanos hemos tenido históricamente ¿Vale la pena seguirlas venerando?

enero 12, 2010

Orgullo regio

Ayer charlaba con un colega en potencia (alumno de Ciencia Política), sobre el amor a Monterrey. Para cualquier regio orgulloso, el campeonato sigue siendo motivo para dedicarle un par de minutos con sus interlocutores. Al mismo tiempo que lo decía, miraba en mi monitor el anuncio de la venta de Cervecería a la empresa holandesa. Le pregunté si esto no afectaría su amor por los Rayados, fuertemente patrocinados por Carta Blanca. Luego hablamos del odio hacia los chilangos que algunos regios aún presumen, y finalmente sobre los factores que determinan la cultura de un lugar.

Me quedé pensando qué es lo que hace que un oriundo ame a su tierra ¿son sus empresas? ¿sus símbolos? ¿su subcultura?¿Estará el orgullo regio intocable después de que caiga Vitro? ¿Y con las que siguen? Creo que al final uno ama un lugar por los recuerdos. Sólo espero que en el presente sigamos sembrando los recuerdos de los del futuro, o no habrá mucho más qué recordar (y amar) en estas tierras.

enero 11, 2010

El frasco del redondeo: Día 1

Voy a hacer un experimento que puede ser de su interés, por eso me atrevo a publicarlo acá. A partir de ayer comencé a recolectar todos los centavos que normalmente "redondeo" en negocios que me lo piden.

Veré cuánto en realidad se están quedando estas compañías, al menos por mi persona.

Ayer rescaté los primeros 50 centavos, que hoy lucen muy tristes y solos en este frasco.

Los mantengo al tanto.

Caín

En vacaciones hasta los políticos desaparecen. Por algo han de decir que es época de felicidad y buenos deseos. Tal como ellos, elegí alejarme de los asuntos públicos temporalmente (como si eso fuera posible), y me concentré en los gustos personales. Y cuando de mi persona se trata, Saramago es uno de mis favoritos.

Enterarme que había publicado un nuevo título sobre la Biblia fue más que suficiente para ir a comprarlo. Con los antecedentes del Evangelio según Jesucristo había suficiente para suponer que sería una buena obra, más con la censura que había lanzado el Vaticano contra el portugués.

Caín reúne la vida del hermano que mata a Abel, y sin embargo no se acaba ahí. Montado en un burro que lo acompañará por toda una aventura épica, el hombre maldito por Dios con una marca en la frente irá recorriendo algunos de los momentos más importantes del Antiguo Testamento. La clave está no sólo en el camino, sino en las interpretaciones que va haciendo Caín/Saramago sobre la voluntad de Dios, sobre su afán por la crueldad, su cinismo al decidir sobre la vida y muerte de quienes más lo adoran, y que él les paga con más dolor, sólo para probar el gran amor que le tienen.

En la misma tesitura que ha hecho a Saramago uno de los mejores escritores de la transición entre siglos, Caín revuelve muchas de las creencias y supuestos sobre el Dios que adoran católicos y judíos, y las expone al juicio social de una cultura supuestamente mucho más avanzada que aquella que recibió la Biblia ¿Qué opina un intelectual del siglo 21 sobre la misoginia, la crueldad y la barbarie de un Dios que no ha hecho más que jugar con su creación una y otra vez? ¿Qué tan bien parado queda si juzgamos aquellos hechos bajo la vara moral y ética de nuestra época?

Sin duda un excelente escrito tanto para creyentes como para críticos. El valor de la obra no reside en el hecho histórico, sino en la profunda reflexión que realiza uno de los hombres más brillantes de nuestra época. La mejor manera de hacer crecer a una religión es cuestionándola, y por supuesto que la mejor manera de destruirla es aceptando como dogmas todos sus valores.