Tecnócratas

Lo que tiene Calderón frente a sí es la posibilidad de poner a un tecnócrata en el poder, algo que no se ha logrado desde que Zedillo llegó a la presidencia después del asesinato de Colosio. Un hombre que carece de carisma pero que reúne las competencias que los organismos financieros internacionales requieren para seguir manteniendo bajo control la economía. Ernesto Cordero tiene una licenciatura en el ITAM y una maestría por la Universidad de Pennsylvania. Ha ocupado una serie de puestos técnicos en la Secretaría de Energía, BANOBRAS, Secretaría de Desarrollo Social y finalmente Secretaría de Hacienda como su titular.

Si algo lo ha caracterizado es su cercanía al presidente, pero también su completa incapacidad para causar cualquier efecto cálido o medianamente humano en las personas con las que intenta socializar. La maquinaria mercadológica que se ha desatado alrededor de su persona para intentar posicionarlo en la carrera presidencial ha sido nula en sus efectos. Los posibles electores lo siguen percibiendo como un personaje gris, incluso torpe. No es la persona que buscamos nos represente frente al mundo, sin embargo al presidente parece no importarle. Controla desde hace dos años a la mayoría de los consejeros del PAN, por lo que le será fácil hacerlo candidato del PAN ¿Qué necesitará para poderle ganar a Marcelo Ebrard, Enrique Peña Nieto o incluso a un desprestigiado López Obrador?

Una estrategia puede ser seguir manteniendo al país en perpetua crisis. Si algo nos ha enseñado el presidente es su capacidad para elaborar cortinas de humo de la mano de su secretario de seguridad y de su procuradora. Solo necesita mandar unos cuantos soldados a “descubrir” delincuentes de los otros partidos. Lo intentaron en Tijuana para revelar al PRI de Atlacomulco en el Estado de México y lo intentaron en Coahuila para exhibir a los Moreira. En ninguno de los dos casos pudieron sobrepasar las máquinas electorales que hoy controla ese partido, pero al menos revelaron lo que pueden llegar a ser capaces en plena campaña federal. Muy seguramente están guardando los dulces más sabrosos para marzo o abril.

¿Podría así coronarse Ernesto Cordero? Lo dudo, pero de la misma manera hubiera dudado de la capacidad de Carlos Salinas de hacer presidente a un hombre totalmente gris como Ernesto Zedillo, y miren lo que sucedió.