a propósito de Davos

Iba a escribir sobre este asunto pero me encontré un artículo que me parece expresa de una mejor manera mi sentimiento sobre este foro. Y bueno, la verdad es que el trabajo ahora me ha tenido limitado y es más fácil el copy-paste ilegal. Que tengan buen día.
Tomado sin permiso de www.elnorte.com

Luis Eduardo Villarreal Ríos
Otro poder es posible

El término "poder" hace referencia a quien toma las decisiones. En la era de la economía mundializada y autonómica, y del Estado-nación debilitado, cabe preguntarnos quién tiene el mando de una nación.Algunos dirán que el Presidente; de ser así, en América Latina, con al menos seis gobernantes críticos del neoliberalismo, uno de ellos indígena, se estaría gestando un giro hacia una izquierda regional.Pero, hay que decirlo, los poderes republicanos hoy no deciden el destino de sus pueblos; éstos son en gran medida rehenes de los ministerios de Hacienda, que a su vez son rehenes del sistema financiero internacional.Un discurso del Presidente de Estados Unidos puede interesar a muchos, pero cuando habla Alan Greenspan, quien por quinta vez preside la Reserva Federal, el mundo de la política económica se inmoviliza.¿Por qué? Sencillamente porque de su gestión dependen la fijación de las tasas de interés, el valor de las acciones, la orientación de la inversión, el destino de las empresas, la vida o la muerte de muchos empleos.Además de este Chairman of the Board, están los capitanes del mundo que, sin desgastarse por no apetecer el bullicio ni los reflectores, controlan los mercados financieros, la información global, la biogenética.El problema con estos dueños de la mayor parte de los recursos del Planeta es su ansia irrefrenable por los dólares, lo que les hace atenerse sólo a las leyes del mercado, ignorando cualquier control jurídico o criterio ético.Esta lógica de la ganancia a cualquier precio implica graves daños a la Tierra. La deforestación y la progresiva liquidación de la biodiversidad harán que en 2010 las selvas del mundo hayan disminuido un 40 por ciento.Dentro de 30 años, el aumento de los gases de efecto invernadero puede provocar un calentamiento de uno a dos grados centígrados elevando el nivel de las aguas oceánicas de 0.5 a 1.5 metros, afectando a millares de ciudades costeras.Por dichas amenazas, como dice el sociólogo Toni Comín, la Humanidad sueña hoy con la construcción de un pacto social global justo, que se concrete en estructuras democráticas de gobierno mundial.Lo único que puede detener a las potencias globales y su enorme poder son instituciones de democracia también global, que restablezcan el equilibrio entre mercado y Estado, entre capital y democracia.Porque, de seguir las cosas como van, de continuar el deterioro ambiental y el consecuente estremecimiento climático; asimismo, de mantenerse crecientes las desigualdades, el mundo se convertirá en una aldea inestable.No es posible que todavía en el planeta mueran de hambre 30 millones de personas y dos mil millones vivan anémicas, tampoco que se mantenga una guerra por el petróleo y la lucha hegemónica mundial.A este respecto tienen gran relevancia los Foros Sociales, como el que dio inicio el martes en Caracas. No los foros como tales, sino la significación de sus participantes como deslegitimación de la hegemonía del mercado.Lo que hacen los Foros Sociales es afirmar que la "economía de mercado", no obstante su eficacia para producir bienes y servicios, ya se agotó como contribución para que la humanidad sea más justa.El afán de erigir otro poder, sostienen algunos, sólo puede reducirse a multiplicar acciones locales como el microcrédito, la economía solidaria, los comités de promoción de Derechos Humanos.Pero, ¿qué tan factible será inscribir tales acciones dentro de un proyecto de poder estratégico más amplio? He aquí un reto del que hablaremos luego.

levrios@yahoo.com