julio 03, 2007

El chino, los billetes y el presidente

Zhenli Ye Gon hizo ayer una acusación gravísima que no puede ser ignorada sencillamente como una ocurrencia de último minuto o una forma de chantajear al gobierno federal, como no se cansaba de repetir ayer el títere de presidencia López Dóriga.

La acusación de Ye Gon fue que el dinero que le fue confiscado en su domicilio era de Javier Lozano, actual secretario del trabajo quien, como menciona el día de hoy Marcela Gómez Zalce, estuvo involucrado en el financiamiento de la campaña calderonista a través de RW Consulting. Además, mencionó que fue presionado y extorsionado por el gobierno federal hasta que concluyó en su aprehensión.

La respuesta de Medina Mora ha sido de total descalificación y ridiculización. Enfático, mencionó que "la ley no se negocia" y fuerte reclama al gobierno de Estados Unidos el que exista una ficha roja contra el señor Ye Gon, y que éste no haya sido aprehendido y enviado a México.

Veamos, porque a mí eso de la confianza ciega no se me da.

1) Resulta muy poco creíble que la AFI diera con semejante cantidad de dinero en un solo punto como producto de una ardua investigación. Las primeras versiones señalaron que fue una "ayudada" de la CIA para Calderón (peleada con la Casa Blanca por un asunto de espías que la administración Bush sacó a la luz pública hace unos meses). Un regalito de legitimación a su errática guerra contra el Narco.

2) Las acusaciones de ese calibre por parte de Ye Gon no podrían venir de manera gratuita, algo tiene que haber para que los abogados hayan llegado a esa decisión de armar un escándalo internacional directamente contra Felipe Calderón y su gente más cercana.

3) Es evidente que existe un interés grande de parte de la Casa Blanca para proteger a Ye Gon y su banda de lavadores de dinero. No es casualidad el foro, el canal y la fuerza con la que el mensaje del chino ha llegado a México, en primetime en el canal más visto del país.

4) La rápida descalificación de Medina Mora, en ese mismo noticiero, no hace más que abrir más suspicacias en este asunto.

Al parecer no hemos visto toda la historia de este asunto. Las campañas electorales cada vez cuestan más dinero, y cada vez resulta más difícil esconder el origen de muchos de los "donativos" que los candidatos reciben.

Es evidente que existió de parte de Estados Unidos un apoyo abierto para la campaña de Calderón, no estoy hablando de espaldarazos explícitos, sino de green money y uno de los dos asesores de campaña que vino a sembrar la campaña negra contra López Obrador. Todo esto como regalo de la Casa Blanca a Vicente Fox. El otro fue un regalo de Aznar.

Hablar de este tema es como intentar armar un rompecabezas con muchas de las piezas escondidas debajo del tapete. Sin embargo, algunas de las piezas que se han destapado ayer son emblemáticas de un cochinero en el que el gobierno federal está involucrado y que al parecer se le ha salido de control.

Escándalo patrocinado por la Casa Blanca para calmar algunos ímpetus hipócritas del residente de Los Pinos en su War on Narco, y de paso para darle una patada en la espinilla a la gente de la CIA.


2 comentarios:

Batz dijo...

Cuando vi al chino decir "copela o muerte" me reí mucho. Pero luego pensé que podría ser muchas cosas menos un chiste... Esa cantidad tan grande de dinero no puede tener un origen blanco, y habrá mucho que escuchar al respecto.Otra vez una rachita al estilo videos de Brozo.

Carlos Gustavo dijo...

Tienes que actualizar este post con la conferencia de prensa de hoy....